No es en modo alguno casual, ni mucho menos un mero trámite, la decisión de patronal y sindicatos de estiba de remitir su preacuerdo sobre el nuevo convenio colectivo para el sector de la estiba portuaria a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), con el fin de que informe del mismo con carácter previo a su tramitación ante la Dirección General de Trabajo.
Ni más ni menos que dos de los tres últimos acuerdos alcanzados por patronal y sindicatos en el ámbito de la negociación colectiva a nivel estatal fueron en su momento denunciados por las autoridades de Competencia, de ahí que en la negociación del V Acuerdo Marco haya sido una condición sine qua non en todo el proceso el que antes de dar carta de naturaleza al convenio debía contar con el visto bueno de la CNMC.
Esto es así hasta el punto de que para garantizar la seguridad jurídica por esta vía se nombró como copresidentes de la Mesa no sólo a un experto en derecho laboral, sino también a un experto en derecho de la competencia.
Y es que la experiencia en este campo ha sido traumática en los últimos años para el sector de la estiba.
En 2007, la entonces Comisión Nacional de la Competencia abrió expediente sancionador contra los firmantes del IV Acuerdo Marco, un expediente que igualmente vino acompañado de la impugnación del convenio por la Dirección General de Trabajo. El expediente de la CNC se saldó con multas para ANESCO, Coordinadora y el resto de firmantes por valor de más de 1 millón de euros, al entenderse que se habían excedido en la regulación los ámbitos competenciales propios de la estiba.
En este sentido y una vez que la denuncia de la Dirección General de Trabajo desembocó también en condena y en la consideración de los principios denunciados como extraestatutarios, los firmantes se vieron forzados en 2011 a aprobar un nuevo IV Acuerdo Marco, ya sí con el beneplácito de la CNMC.
Ahora bien, dicho nuevo IV Acuerdo Marco fue modificado en junio de 2017 tras llegar a un acuerdo el banco sindical y el banco patronal al amparo del real decreto de reforma de la estiba 14/2017.
De forma inmediata y pese al visto bueno de Trabajo, este nuevo acuerdo también fue denunciado por la actual CNMC, iniciándose un expediente sancionador en el marco del cual incluso se alumbró una propuesta de resolución que de nuevo contemplaba sanciones millonarias para los firmantes. Ahora mismo, la decisión está en suspenso a la espera de que se resuelva una cuestión prejudicial planteada por la propia CNMC ante el Tribunal de Justicia de la UE. La tramitación de esta cuestión arrancó oficialmente a finales del pasado mes de octubre y, en función de la respuesta del TJUE, así procederá en su resolución la CNMC.
