Maersk se fija nuevos y ambiciosos objetivos en emisiones de CO2 en el horizonte del año 2050
Con el fin de acelerar la transición a un transporte marítimo libre de carbono, Maersk ha anunciado su objetivo de alcanzar la neutralidad de carbono para el año 2050. Para lograr este objetivo, los buques sin carbono deben ser comercialmente viables para el 2030, y se requiere una aceleración de las nuevas innovaciones y la adaptación de la nueva tecnología. .
- 12 diciembre 2018 01:00
- Última actualización
11 diciembre 2018 13:03
El clima es uno de los problemas más importantes del mundo y, dado que representa alrededor del 80% del comercio mundial, la industria del transporte marítimo es vital para encontrar soluciones. Hasta ahora, las emisiones relativas de CO2 de Maersk se han reducido en un 46% (línea de base de 2007), aproximadamente un 9% más que el promedio de la industria.
A medida que el comercio mundial y, por lo tanto, los volúmenes de transporte continuarán creciendo, las mejoras de eficiencia en la tecnología actual basada en combustibles fósiles solo pueden mantener las emisiones en los niveles actuales, pero no reducirlas ni eliminarlas significativamente.
“La única forma posible de lograr la tan necesaria descarbonización en nuestra industria es transformándonos completamente en nuevos combustibles y cadenas de suministro libres de carbono”, dice Søren Toft, director de Operaciones de A.P. Moller-Maersk. Maersk está esforzándose por resolver problemas específicos del transporte marítimo, ya que requiere soluciones diferentes a las de la automoción, el ferrocarril o la aviación. Así, se espera que el camión eléctrico sea capaz de transportar un máximo de 2 TEUs y se proyecta que tenga una autonomía de 800 km.
Importantes inversiones
En comparación, un buque portacontenedores que transporta miles de TEUs que navegan desde Panamá a Rotterdam recorre alrededor de 8.800 km. Con una duración corta de la batería y sin puntos de carga a lo largo de la ruta, los desarrollos innovadores son imprescindibles.
Dado el tiempo de vida de 20 a 25 años de un buque, ahora es el momento de unir fuerzas y comenzar a desarrollar el nuevo tipo de naves que cruzarán los mares en 2050.
“Los próximos 5 o 10 años serán cruciales. Invertiremos importantes recursos para la innovación y la tecnología de flotas para mejorar la viabilidad técnica y financiera de las soluciones descarbonizadas. Durante los últimos cuatro años, hemos invertido alrededor de 1.000 millones de dólares y contratamos a más de 50 ingenieros cada año para desarrollar e implementar soluciones de eficiencia energética. En el futuro no podemos hacer esto solos”, añade Søren Toft.
La investigación y el desarrollo es clave para alejar a la industria de la tecnología actual basada en combustibles fósiles y al establecer este objetivo ambicioso, Maersk espera generar un impulso hacia los investigadores, desarrolladores de tecnología, inversores, cargadores y legisladores que activarán una fuerte participación en la industria, el desarrollo conjunto y el patrocinio de soluciones sostenibles que aún no se ha visto en la industria marítima. En 2019, Maersk planea iniciar un diálogo abierto y colaborativo con todas las partes posibles para abordar uno de los temas más importantes del mundo: el cambio climático.
Søren Toft, director de Operaciones de A.P. Moller-Maersk.