Geodis y Phantom Auto desarrollan una carretilla elevadora con control remoto
Geodis ha colaborado con Phantom Auto, expertos en software de manejo remoto a larga distancia de vehículos no tripulados, en el desarrollo de una carretilla elevadora controlable a distancia. Este innovador programa tiene como objetivo mejorar la seguridad y el confort del personal operario y crear oportunidades laborales para personas con discapacidades físicas o pertenecientes a grupos infrarrepresentados históricamente dentro del sector logístico.
- 31 marzo 2021 12:42
- Última actualización
31 marzo 2021 11:54
Los primeros ensayos se han desarrollado con éxito en Francia (Levallois y Le Mans), en el marco de la colaboración plurianual entre Geodis, Phantom Auto y Fenwick-Linde para crear la primera carretilla elevadora con manejo remoto, controlable desde miles de kilómetros de distancia.
"Es un hito precursor de una revolución en la naturaleza del trabajo logístico, que amplía las oportunidades laborales para las personas pertenecientes a grupos demográficos infrarrepresentados históricamente, como personas con discapacidades físicas, geográficamente aisladas, etc.)", detallan desde Geodis.
La cooperación surge de una idea creativa de un directivo de Geodis y se ha desarrollado en el marco del programa de innovación interna de Geodis. La solución utiliza una carretilla elevadora de Fenwick combinada con el software de manejo remoto seguro, independiente de la red e interoperable de Phantom, permitiendo a los trabajadores operar a distancia el vehículo y multiplicando las ventajas en eficiencia y utilización del parque móvil. Por ejemplo, un trabajador remoto podrá manejar varias carretillas elevadoras en diferentes almacenes y a diferentes horas del día, todo desde un lugar centralizado.
“La tecnología de Phantom Auto permite un equilibrio dinámico de la asignación de personal, almacenes más seguros, un mayor bienestar de los trabajadores y oportunidades de empleo para quienes, de otro modo, no podrían conducir carretillas elevadoras”, explica Stéphanie Hervé, directora de Operaciones de GEODIS para Europa Occidental, Oriente Medio y África.
“Esta innovación será beneficiosa para la sociedad en general y marca el futuro de las operaciones logísticas. Creemos que la tecnología debería ser útil a las personas, y eso es lo que ilustra esta colaboración con Phantom Auto”, añade Hervé.
Por su parte, Shai Magzimof, cofundador de Phantom Auto, asegura que Phantom "se enorgullece de haber colaborado en Europa con Geodis en esta iniciativa revolucionaria, que ofrece múltiples ventajas en eficiencia y mayor seguridad del entorno de trabajo”.
“El software de manejo remoto de Phantom puede ayudar a las personas con discapacidades físicas, no solo a moverse del lugar A al lugar B, sino también creando oportunidades de empleo reales, y nos encanta que Geodis esté utilizando nuestra tecnología en positivo”, destaca Elliot Katz, cofundador de Phantom.
Los operadores remotos de Geodis se conocen también como conductores digitales. Conductores digitalesLos operadores remotos de Geodis, también conocidos como conductores digitales, podrán “teletransportarse” de un vehículo a otro y de un almacén a otro con solo pulsar un botón, todo ello desde la seguridad de una oficina alejada.
El software de Phantom permite a los operadores remotos de GEODIS ver y escuchar en tiempo real lo que sucede alrededor de cada vehículo, para así guiarlos con seguridad y confianza desde otro lugar.
El programa de carretillas elevadoras con manejo remoto de GEODIS contribuye a:
• Reducir las lesiones y aumentar la seguridad general en los almacenes.
• Reducir el número de personas presentes físicamente dentro de los almacenes, mejorando la comodidad de los trabajadores.
• Crear nuevos empleos de operador remoto con mucho futuro por delante, desempeñables desde un entorno de oficina.
• Contratar a personas con discapacidades físicas que les impidan manejar carretillas elevadoras tradicionales, o pertenecientes a otros grupos demográficos infrarrepresentados históricamente.
• Contratar a personas situadas en regiones alejadas de los almacenes, incluidas las zonas de mayor desempleo.