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Carretera: 5 razones para perder la paciencia

El enésimo ultimátum del sector del transporte de mercancías por carretera vuelve a tener al Gobierno como destinatario y el trasfondo de un paro patronal. La situación sigue siendo “insostenible”, concitándose nuevas claves para que el sector pierda la paciencia.

  • Última actualización
    25 octubre 2021 18:26

Cinco son las razones principales que llevaron ayer al Comité Nacional de Transporte  por Carretera a lanzar un nuevo ultimátum, tal y como adelantó diariodelpuerto.com, y a advertir a sus bases asociativas que no va a quedar más remedio que acometer medidas “excepcionales”, en clara alusión a un paro patronal.

1.- TRES AÑOS “DANDO LARGAS”

El próximo 22 de noviembre, es decir, dentro de un mes, se van a cumplir tres años desde que el Comité Nacional de Transporte por Carretera elevara al entonces Ministerio de Fomento un total de 12 medidas/demandas  “imprescindibles para el normal funcionamiento de un sector estratégico como es el transporte de mercancías por carretera”.

Desde entonces, el Comité no sólo no ha logrado que se atiendan sus demandas, sino que en algunas de ellas, se ha viene legislando en sentido contrario.

“Hastiados”, es el adjetivo con el que más se identifican las distintas fuentes sectoriales consultadas por Diario del Puerto, que subrayan que la pandemia no puede ser considerada una excusa en el retraso a la hora de atender las demandas del sector.

2.- Un incumplimiento tras otro

En estos tres años el Gobierno no sólo no ha atendido las demandas del sector, sino que ha incumplido, a juicio del CNTC, los distintos compromisos alcanzados.

EL DATO

Estado de la negociaciónLa interlocución entre el Gobierno y el Comité Nacional de Transporte por Carretera ha experimentado diversos avatares en los últimos años.Más allá de la diluida negociación de 2019, tras los Acuerdos de Julio20, se inició un proceso de materialización de los mismos enrarecido por la creación de la denominada Mesa Tripartita en la que la compleja y deteriorada relación entre transportistas y cargadores llevó a su fracaso.Unido a esto, a comienzos de 2021 se produjo el cambio de ciclo con un nuevo director de Transporte Terrestre, Jaime Moreno, que apostó por encuadrar los Acuerdos de Julio20 en el nuevo Plan de Impulso de la Sostenibilidad del Transporte por Carretera, presentado oficialmente al sector como borrador justo antes del verano. A partir de ahí, el CNTC, en diversos grupos de trabajo, ha venido manifestando su rechazo a cómo se planteaban las medidas en el Plan, de tal forma que el Comité está ahora mismo a la espera de recibir por parte de la Dirección General una nueva propuesta de borrador.

No hay que olvidar que en enero de 2019 y en julio de 2020 se produjeron sendas situaciones límite.

En enero de 2019 el CNTC fijo fecha límite para la convocatoria de un paro patronal.

En 2020, directamente se convocó un paro a partir del 27 de julio.

En el caso de 2019 se llegó a establecer un proceso de negociación ordenado, que fracasó por la falta de concreción y las dobles elecciones generales.

En el caso de 2020, se llegó a un acuerdo con el secretario de Estado de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Pedro Saura, en el que, a cambio de desconvocar el paro, el Ministerio Establecía una serie de compromisos.

Más de un año después, de los mismos sólo ha visto la luz el régimen sancionador de la morosidad, no existiendo avances concretos en el resto de temas, a juicio de las fuentes del CNTC consultadas, o incluso actuándose en contra de lo pactado, sobre todo en las cuestiones más sensibles.

3.- Un plan “del Gobierno”

A comienzos de 2021 y tras el nombramiento de Jaime Moreno como director general de Transporte Terrestre, el Ministerio decidió canalizar el cumplimiento de los Acuerdos de Julio20 mediante la creación del nuevo Plan de Impulso de la Sostenibilidad del Transporte por Carretera, rebautizado como Plan Impulsa,  cuyo primer borrador fue presentado al sector en el mes de junio pasado.

Dicho Plan es rechazado por el sector porque, en primer lugar, supone a su juicio una renegociación de facto de los acuerdos ya cerrados en 2020.

El sector demanda que se cumpla lo acordado en su día, no que el Ministerio aproveche para replantear lo ya negociado en base a sus intereses.

En segundo lugar, dicho Plan es rechazado por el sector al no plantear en algunos casos propuestas firmes, sino intenciones o medidas en condicional que, a su juicio, dejan muchas cuestiones en el aire.

4.- Globos sonda y “de espaldas”

Otra de las cuestiones que más está tensionando en las últimas semanas al sector son los “globos sonda”, el que se actúe “de espaldas al sector” y lo que se denomina política de “hechos consumados”.

Por un lado, el sector considera que el Ministerio está llevando a cabo un debate público sobre cuestiones tan polémicas como los peajes no ya sólo manifestando su punto de vista, sino trasladando una sensación de política de hechos consumados a espaldas de los compromisos que tiene con el sector.

De igual forma, se están anunciando a la opinión pública importantes inversiones, como los 400 millones de euros para la renovación de flotas de transporte de mercancías por carretera, sin que, a su juicio, nadie haya tenido la deferencia con el sector de consultar su punto de vista ni conocer sus propuestas al respecto.

A juicio de las asociaciones consultadas, este modo de proceder daña la confianza, las bases del diálogo y los procesos de interlocución existentes, no ayudando a tender puentes.

5.- Sin noticias de la Ministra

En medio de esta falta de entendimiento y con tantos mensajes encontrados, otra de las grandes cuestiones que exasperan al Comité es que la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, aún no haya tenido la deferencia de reunirse con el CNTC.

Es proverbial la lentitud histórica de los ministros del ramo a la hora de, como mínimo, mantener un encuentro institucional con el Comité.

No obstante, el último ministro, José Luis Ábalos, se reunió con el Comité al mes de llegar al cargo, lo que parecía marcar una senda no seguida por Sánchez, que lleva ya cuatro meses en el MITMA y no ha atendido ni las invitaciones del CNTC ni de sus asociaciones a título individual, lo que para el Comité es una descortesía y evidencia la total falta de interés.

Raquel Sánchez, ministra de Transportes, y Carmelo González, presidente del CNTC. Abandono+Trato vejatorio=Medidas excepcionalesTal y como adelantó el viernes diariodelpuerto.com, el Comité Nacional de Transporte por Carretera (CNTC) publicó ayer un comunicado en el que explica su actual hartazgo y la necesidad de estar preparados para “medidas excepcionales” ante el “abandono” por parte del Gobierno y el “trato vejatorio” de los clientes.Para el CNTC, “el sector lleva años atravesando una situación dificilísima, con enormes problemas de tipo estructural y coyuntural, acerca de los cuales se ha llamado repetidas veces la atención tanto de la Administración, como de los clientes, sin haber obtenido la menor respuesta, aun cuando existe un riesgo cierto de quiebra estructural del sector, viviendo ambos bajo el ensueño de,  ‘si estos desaparecen, otros lo harán’, ignorando la realidad que, en las circunstancias actuales del sector, no habrá ningún otro ”.“Desde hace más de dos años, -prosigue el CNTC- la Administración tiene una lista de los problemas concretos del transporte de mercancías por carretera para los que se ha pedido solución, sin que en todo este tiempo se haya hecho nada para resolverlos, incluso cuando existen compromisos firmados por todo un Secretario de Estado. Más bien al contrario, cada día los profesionales del sector se desayunan con la realidad del aumento de costes, una alarmante ausencia de conductores por la total ausencia de incentivos para la profesión, trabajando para unos clientes que les someten a un trato vejatorio, obligándoles a realizar labores propias de un carretillero, tras largas horas de espera en sus instalaciones en condiciones degradantes”.En esta tesitura, según el Comité, “al parecer el Gobierno sin tener en cuenta lo acordado, tiene intención de imponer su criterio en cuestiones como el pago por uso, la transición ecológica y el cambio de dimensiones y pesos”.Según el CNTC, “en esta situación de abandono, ante un riesgo cierto de quiebra estructural del sector, solo cabe llamar a la sensibilidad de las bases asociativas de nuestras organizaciones con el fin de adoptar si fuera preciso medidas excepcionales, sin descartar ninguna, que trasladen a la sociedad el grave peligro ante el que se encuentra el transporte por carretera y que, desde luego, trasciende a su mero interés”.