“Dentro de diez años los millennials son los que dirigirán las empresas”, por lo que apostar por la digitalización es clave para los años próximos y “adaptarnos a las nuevas generaciones desde la digitalización”, explicó Rizzuto. Además, hizo hincapié en la sostenibilidad y el hecho de “visibilizar las emisiones de CO2 para la carga aérea”.
Respecto a Barcelona, Francisco Rizzuto resaltó el gran potencial de la ciudad debido a su “multimodalidad, ya que dispone de conexión entre puerto, aeropuerto, trenes y camiones, una gran ventaja que no tienen otras zonas”.
Reducción del 4%
Javier Enebral, air cargo consultant de GPA, expuso los resultados del Observatorio de Carga Aérea 2019, entre los que destacó “el retroceso de un 4% de la carga aérea a nivel mundial”.
En referencia a Barcelona, Enebral destacó las 177.000 toneladas que gestionó el aeropuerto durante 2019, “lo que significa una cifra récord para la infraestructura”. No obstante, continuó, “Zaragoza superó a Barcelona en carga aérea con 182.700 toneladas”.
Sobre el tipo de mercancías que salen desde Catalunya, con datos del 2018, resalta el sector textil, alimentario y farma. Además, el mes del año con más movimiento fue octubre, “debido, tal vez, a la proximidad con las fiestas de Navidad y el Black Friday”.
“No existe un planeta B, por lo que los esfuerzos que haga el sector por la mejora competitiva y la sostenibilidad ambiental y social son fundamentales”
Last mile y talento
Santiago Bassols, director general del BCL, quien señaló la importancia de la carga aérea en el sector logístico y su “impacto en sectores claves de la economía catalana y nacional”, hizo un repaso de la perspectiva de actividades del BCL durante este 2020, centradas, sobretodo, en sostenibilidad, última milla y talento.
En pro de la sostenibilidad “vamos a lanzar un proyecto, el Logistic Green New Deal para activar medidas y proyectos que permitan descarbonizar el sector y apostar por las energías renovables y eficiencia energética”. Bassols manifestó las expectativas respecto a esta iniciativa, “ya que no existe un planeta B, por lo que los esfuerzos que haga el sector por la mejora competitiva y la sostenibilidad ambiental y social son fundamentales”.
Desde el BCL también iniciarán el grupo Last Mile Group. “La última milla y la movilidad están relacionadas con la sostenibilidad y con la adaptación del sector, por ejemplo, a retos como la distribución en zonas urbanas con restricciones como la Zona de Bajas Emisiones”, añadió Bassols.
Por último, el BCL apostará por un ecosistema de startups relacionadas con la logística “para acelerar los procesos de innovación del sector”. El Observatorio de la Logística, continuó, “detectó que en Catalunya existen 260 startups relacionadas con la logística o que sus tecnologías tienen impacto en el sector, por lo que introducirlas en este ámbito es importante”.
David Verde, director de MBA Freight Solutions; Paco Fernández, director de Transporte de Mango, y Francesc Maristany, miembro de la Junta Directiva del Clúster Catalán de la Moda y el Textil (Modacc). Foto L.Escrihuela.
Carga aérea en el sector textil
Aunque Paco Fernández, director de Transporte de Mango, confesó que el transporte aéreo “es caro y no nos gusta”, admitió la necesidad de “convivir con él”, debido, en parte, al incremento de la compañía textil en el comercio online, lo que se traduce en más mercancía aérea. De hecho, Fernández resaltó su satisfacción ante “la colaboración con Aena y las terminales”.
“Tenemos mucho peso en Europa, por lo que intentamos mover la mercancía por camión, en cambio, fuera de Europa la ropa la movemos por avión”, añadió. En este sentido, Fernández reiteró que los tres retos actuales son la sostenibilidad, la última milla y la digitalización del sector aéreo.
Por su parte, David Verde director de MBA Freight Solutions, destacó que, en su colaboración con Mango y el trabajo de digitalización de procesos “hemos minimizado todos los datos y hemos llegado a una reducción del 40% de mails, una cifra muy importante”.
La jornada del BCL acogió también la firma del manifiesto de carga aérea por parte del propio BCL. Foto L.E.
Firma del manifiesto de Carga Aérea
Durante la jornada, Santiago Bassols firmó el manifiesto de la Carga Aérea, formalizando así su adhesión para “la mejora la competitividad del sistema de carga aérea”. Haciendo referencia a los Objetivos de Desarrollo Sostenible, en concreto al número 17 sobre las alianzas, el director del BCL aseguró que “trabajar conjuntamente es la mejor forma de buscar soluciones, colaborando competitivamente entre el sector privado y público”.
Eduardo Cerezo, jefe Divisón Aena, destacó entre los retos más importante del sector, el de la digitalización de la carga aérea, “un asunto eternamente pendiente”.
Por su parte, Jesús Cuéllar, presidente de Foro MADCargo, recordó cómo surgió la iniciativa y es que “hacia falta hacer algo a nivel colectivo”, teniendo en cuenta que “la carga aérea en general es una industria muy fraccionada”.
El manifiesto, continuó, contiene “un primer análisis de la situación de lo qué están haciendo otros aeropuertos europeos competidores de los españoles, y una serie de medidas y sugerencias”. De esta manera se extrajeron tres grupos enfocados en aumentar la digitalización, mejorar los procesos de inspección en frontera y, por último, la promoción de la carga aérea. Se trata “de un modo de transporte que no se percibe tan relevante como realmente es”, aseguró Cuéllar.
El presidente de Foro MADCargo destacó que, “a través del transporte aéreo se mueve aproximadamente el 30% del valor de mercancía de las operaciones de comercio intercontinental”. Generalmente, añadió, “el transporte aéreo está relacionado al transporte de mercancías de alto valor añadido que pueden permitirse pagar el transporte aéreo, lo que significa trabajo de calidad”.