MADRID. Tras el techo de 2019 con 1.068 millones de kilos, la pandemia y su herencia venían lastrando a los aeropuertos españoles con tres ejercicios de comportamientos dispares que han desembocado al fin en un 2023 en el que los 1.079 millones de kilos logrados suponen un nuevo máximo histórico en España.
Tres son las claves que han permitido a final de año el último empujón para batir el récord y crecer un 7,9%.
En primer lugar está, sin duda, el excelente mes de diciembre que ha vivido la carga aérea, con un crecimiento con respecto a igual periodo de 2022 del 17,3%, gracias, principalmente al incremento de los tráficos de Madrid (+23,6%), Barcelona (+13,0%) y Zaragoza (+22,6%).
En segundo lugar hay que hablar de Zaragoza, que Inditex volvió a reactivar tras el verano hasta el punto de que ha logrado cerrar 2023 en positivo con 129,7 millones de kilos (+2,2%) y recuperar la debacle del año 2022.
En tercer lugar, Madrid-Barajas se mantuvo sólido y sin fisuras y logró en 2023 un tráfico de 643,53 millones de kilos, que no sólo representa un nuevo máximo histórico con un crecimiento del 13,6% con respecto a 2022 y del 14,9% con respecto a la prepandemia.
Además, el peso de Madrid alcanza niveles inusuales en los últimos años para cerrar 2023 moviendo el 59,6% del total de la mercancía en España.
Junto a Madrid y Zaragoza, también logró cerrar 2023 en positivo el Aeropuerto de Barcelona-El Prat con 156,48 millones de kilos (+0,6%), aunque todavía un 11,5% por debajo de los tráficos prepandemia.
Con respecto a Vitoria-Foronda, movió 71,68 millones de kilos, un descenso del 2,6% agravado por el mal cierre del año al caer en diciembre un 9,3%.