El principal problema con el que se encuentra ahora mismo la logística aérea es que las aerolíneas se resisten a ampliar las frecuencias de sus vuelos. Así lo explica Paul Traverso, Managing Director del GSA Kales Airline Services, quien asegura que “algunas compañías ni siquiera han arrancado y otras mantienen las frecuencias del inicio de la pandemia y tampoco tienen previsión de aumentarlos”. En este sentido, Traverso destaca que de las tres compañías con las que trabaja habitualmente Kales Airlines Services on line en Barcelona, en estos momentos, únicamente opera una de ellas.
“Algunas compañías ni siquiera han arrancado y otras mantienen las frecuencias del inicio de la pandemia y tampoco tienen previsión de aumentarlas”
“La situación no es buena”, afirma por su parte Luis Alberto Martínez, director general de Gen-Air en Barcelona, y añade que “las cifras de este verano no tienen nada que ver con los meses de julio y agosto del año pasado”.
Dos de las principales aerolíneas para las que trabaja Gen-Air en Barcelona habitualmente cuentan con una oferta de 15 vuelos a la semana y ahora sólo operan cuatro vuelos semanales. “Una de ellas ha reducido su oferta en más del 70% y la otra en más del 50%”, apunta Luis Alberto Martínez.
Lo mismo le ocurre a Capitol Airline Services, que de las tres compañías con las que trabaja on line “sólo una de ellas sigue operando al 100%, otra lo hace al 10% y las dos restantes directamente no vuelan”, detalla Roberto Gallego, el Branch Manager de Capitol Airline Services en Barcelona.
“La situación generada por la pandemia del Covid-19 no es buena, las cifras de este verano no tienen nada que ver con los meses de julio y agosto del año pasado”
Vuelos de pasaje/cargueros
Por otra parte, los operadores aseguran que las aerolíneas mantienen la oferta de los aviones de pasaje que se habilitaron para operar vuelos de carga.
“Estos vuelos van llenos”, apunta Roberto Gallego, “y si la carga no cabe en este tipo de aviones, entonces utilizamos cargueros”.
“Ahora mismo combinamos las dos opciones, eso sí, a precios verdaderamente extraños”, aclara.
En el caso de Gen-Air, explica Luis Alberto Martínez, “seguimos con aviones de pasaje combinados con carga, con una capacidad de hasta 50 toneladas, y tenemos también los cargueros, aunque hemos concentrado este tipo de vuelos en Madrid, desde donde también damos cobertura a Portugal”.
“De las tres compañías con las que trabajamos sólo una de ellas sigue operando al 100%, otra lo hace al 10% y las dos restantes directamente no vuelan”
En cuanto a la tipología de carga, Martínez señala que “los productos farmacéuticos son la carga más estable, aunque su demanda ha bajado respecto al inicio de la pandemia”. Ahora empiezan a adquirir “cierto volumen” las cargas del sector textil, “que hasta la fecha han estado muy paradas”.
La realidad es que en este momento, “el mercado ha bajado mucho, estamos todavía en una situación bastante crítica y no vemos la luz”, señala Paul Traverso. “Algunas compañías prevén aumentar sus frecuencias en los meses de septiembre o de octubre, pero no hay nada seguro”.
Por su parte, Luis Alberto Martínez apunta que “la recuperación será larga porque aún hay muchos países con las fronteras cerradas a nivel de aviación fuera de la comunidad europea”. Además, “la incidencia de pandemia en todo el mundo todavía es bastante importante, con lo que se importa y se exporta poco”.
Poco optimista se muestra también Roberto Gallego, quien explica que “a la bajada del volumen de trabajo se suma la incertidumbre de si el Gobierno permite finalmente alargar los ERTE”.
A pesar del contexto que atraviesan, los operadores ponen sus esperanzas en el trabajo y confían en el desarrollo de una vacuna que permita volver a la “normalidad” o por lo menos a la recuperación de la actividad en el sector.
La guerra de los preciosOtro de los factores que ahora mismo genera incertidumbre y continuos cambios en la actividad de la carga aérea son los precios, que “nada tienen que ver con los del inicio de la pandemia” y que resultan “verdaderamente extraños”, apunta el Branch Manager de Capitol Airline Services en Barcelona, Roberto Gallego.
Así, Luis Alberto Martínez, director general de Gen-Air en Barcelona, recuerda que al principio de la pandemia, debido a la fuerte demanda de carga aérea especialmente de material sanitario y farmacéutico, los precios de los fletes experimentaron una drástica subida. “En cambio, ahora el mercado se ha ido regulando y, dependiendo de las rutas, se han mantenido algunas tarifas elevadas y otras se han igualado a los precios que solía haber antes de la pandemia”.
“Incluso, en algunos casos, han bajado”, agrega Roberto Gallego.
Esto se debe, según apunta Paul Traverso, a que “las compañías que operan vuelos de pasaje exigen obviamente contar con un mínimo de pasajeros que garantice la rentabilidad económica de operar este tipo de vuelos. De lo contrario, no garantizan su operativa”. Llegados a este punto, “la poca demanda de pasajeros obliga a las compañías a subir los precios de la carga para poder cubrir los gastos de operación de la frecuencia”. Pero, “finalmente, en algunas ocasiones terminan bajando los precios de los fletes para poder llenarlos de carga y que el avión no vaya vacío”, afirma.
“Esto genera aún mayor incertidumbre entre las compañías de carga”, concluye el Managing Director de Kales Airline Services.