El reinicio de la ruta de Iberia con Guayaquil (Ecuador) se puso en marcha en mayo e incluye tres frecuencias semanales operadas con aviones Airbus A-330/200. Este vuelo directo es un importante enlace comercial para el sector de productos perecederos ecuatorianos como son las flores en mercados clave como España y Países Bajos.
Rodrigo Casal, director Comercial Regional para América Latina de IAG Cargo, asegura que "siempre hemos tenido excelentes conexiones entre Europa y América Latina, por lo que estamos encantados de poder ofrecer esta nueva ruta directa a Guayaquil junto con el aumento de frecuencias con Brasil y México, y la reanudación de nuestro servicio a Puerto Rico. Estos servicios adicionales representan una oportunidad única para los negocios en la región y estamos entusiasmados por apoyar aún más a la industria de productos perecederos y ofrecer más capacidad al sector de la automoción. IAG Cargo sigue comprometida con los clientes de la región y continúa trabajando en la reapertura de rutas y en el aumento de los servicios en las rutas comerciales más transitadas".
Iberia ha aumentado hasta siete sus frecuencias semanales con Sao Paulo (Brasil), con un vuelo diario desde Madrid, operados con aviones Airbus A-330/300 y con British Airways una rotación de cuatro semanas, en un Boeing 787 o 777, desde Londres Heathrow. Las rutas facilitan el transporte de frutas tropicales, piezas de automóvil y de fabricación a Europa y el Reino Unido, y de productos electrónicos, farmacéuticos y médicos a Brasil.
Desde este mes de junio, IAG Cargo ofrece servicio de reserva de carga en vuelos desde Madrid a San Juan de Puerto Rico, ya que la compañía reanuda los vuelos directos el próximo mes de julio.
Y, desde esa misma fecha, los clientes de IAG Cargo se beneficiarán de diez vuelos semanales desde Madrid a Ciudad de México, con dos frecuencias diarias los domingos, martes y jueves, operados por los Airbus A-350/900 de Iberia.
Esta conexión es clave para el transporte regular de piezas de automóvil y mercancía de perecederos, a los que actualmente hay que añadir productos médicos para apoyar la lucha contra la COVID-19, tales como: oxímetros, viales de la vacuna o equipos de protección individual (EPI), entre otros.