ROMA. El árbol de Navidad del Papa, en la Plaza de San Pedro en la Ciudad del Vaticano, un abeto de 29 metros, recorrió 650 kilómetros desde la localidad de Letro, situada en la provincia de Trentino, hasta Roma, a bordo de un camión MAN TGS de la compañía italiana de transportes especiales Santoni Srl.
En los bosques de esa región del norte de Italia, el árbol de Navidad se escogió meticulosamente de entre los abetos destinados a ser talados conforme a estrictos criterios de sostenibilidad. Estos bosques poseen la certificación PEFC, que avala una gestión forestal sostenible.
Debido al enorme tamaño, Santoni Srl aseguró el abeto con redes y cuerdas para su traslado. El convoy especial, con su flamante tractora MAN TGS, tenía una longitud total de 34 metros y una anchura de unos 3,5 metros por lo que la mayor parte del trayecto hasta Roma se realizó durante la noche, en condiciones de poco tráfico.
Desde el principio, Santoni y su equipo estuvieron involucrados en este trabajo tan especial, desde la tala del árbol de Navidad hasta el transporte a Roma, pasando por la ayuda a los leñadores con una grúa de su propia empresa.
“Como es lógico, quería ponerme al volante. Primero, porque yo había elegido personalmente este vehículo y, segundo, porque no era un transporte rutinario. Fue un gran alivio ver que todo salía bien, puesto que sentía el peso de la responsabilidad. Además, este éxito confirmó que había tomado la elección correcta del camión”, afirma Santoni.