Se trata de una campaña de una semana de duración organizada por la asociación RoadPol a nivel europeo bajo el nombre Operation Truck&Bus y que en España desarrolla la Dirección General de Tráfico.
Los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil han controlado a un total de 19.039 vehículos, de los que 5.112 conductores de camiones y 124 de autobuses fueron denunciados por no cumplir alguno de los preceptos de la normativa. Además, se inmovilizaron 60 camiones por diferentes motivos atribuidos al conductor o al vehículo y que impedían continuar la circulación por carretera con seguridad.
Como viene siendo habitual, las infracciones más numerosas (55%) han sido las motivadas por el exceso de horas de conducción. En esta ocasión, 2.468 conductores fueron denunciados por infracciones relativas a los tiempos de conducción (2.442 camiones y 26 autobuses) y 420 por cuestiones relacionadas con el tacógrafo (398 camiones y 22 autobuses).
Destaca el número de conductores que conducían con alcohol u otras sustancias psicotrópicas, cuando fueron requeridos por los agentes de la agrupación de tráfico para realizarles las oportunas pruebas. En concreto, 14 conductores de camión fueron denunciados por dar positivo a alcohol y 44 a otras drogas. Estos datos reflejan un mayor número de positivos que en la campaña realizada en febrero del año pasado donde la cifra fue de 15 positivos a drogas y 9 positivos a alcohol.
También es importante la cifra de infracciones relativas a la documentación, tanto del vehículo como del conductor, que suponen que 1.026 conductores (949 de camiones y 77 de autobuses) circulaban con irregularidades administrativas, así como la de las sanciones impuestas por infracciones relacionadas con la Inspección Técnica (573).
Además, 674 conductores de camión fueron denunciados por exceso de peso o mala disposición de la carga y 142 por infracciones relativas a cinturones de seguridad y otros dispositivos (131 usuarios de camiones y 11 de autobús).
Respecto a la velocidad, 175 conductores de camiones fueron detectados circulando a velocidades superiores a las permitidas.