La propuesta de nueva Directiva ya reconocía que las tasas por el uso de infraestructuras, por su propia naturaleza, no reflejan con exactitud los costes reales de las infraestructuras ni son eficaces para incentivar un sistema más limpio y eficiente.
Por consiguiente, se establecía que en el caso de los vehículos pesados estas tasas deberían ser gradualmente sustituidas por tasas basadas en la distancia, que son “más justas, más eficientes y más eficaces”.
No obstante, esta gradual sustitución, propone ahora la Comisión de Transporte en el informe aprobado a finales de mayo, debe ir “pareja con la designación en cada Estado miembro de una autoridad independiente de supervisión a fin de verificar el correcto funcionamiento de los sistemas nacionales de tarificación”, con el fin de garantizar la transparencia y la no discriminación entre los operadores y se compruebe que los ingresos procedentes de los peajes se ajustan a la Directiva”.
La sustitución gradual de las tasas de base temporal por tasas basadas en la distancia recorrida, añade el informe aprobado en Comisión y que deberá votar el Parlamento, podría suponer un obstáculo al acceso a los principales mercados europeos de transporte de las regiones y los países periféricos como España.
Para evitar esto, se recoge en el informe, “debe establecerse un sistema de compensación para contrarrestar los costes añadidos y garantizar así que no represente una importante pérdida de competitividad” para las empresas de transporte.
El informe del ponente aprobado por la Comisión de Transporte, además, recoge ampliar el ámbito de la directiva e incluir a las furgonetas de reparto.
Según la redacción resultante, los vehículos ligeros constituyen la fuente de la mayoría de los impactos ambientales y sociales negativos del transporte por carretera relacionados con las emisiones y la congestión.
Con el fin de preservar la competencia leal, el nuevo texto plantea que la Directiva en el ámbito de aplicación de las tasas aplicadas a los vehículos pesados incluya a las furgonetas que realizan transportes de mercancías por carretera.
El informe aprobado por la Comisión de Transporte del Parlamento también incluye en la directiva otras consideraciones trascendentes como que “a fin de garantizar una adecuada reutilización de los ingresos procedentes de las tasas por costes externos, sería conveniente reinvertir dichos ingresos en el sector de la infraestructura de transporte a fin de fomentar modos de transporte más sostenibles con un menor impacto medioambiental”.Impuestos
A su vez también se plantea en el informe de la propuesta de directiva que “los impuestos sobre los vehículos podrían ser un obstáculo para la introducción de peajes”, de tal forma que “para apoyar la introducción de peajes, procede que los Estados miembros dispongan de un mayor margen de maniobra para reducir rápidamente los impuestos sobre los vehículos, lo que implica reducir cuanto antes los mínimos fijados” en la regulación comunitaria.
Por último, se recoge que a más tardar dos años después de la entrada en vigor de la Directiva, la Comisión presentará una propuesta de marco aplicable de forma general, transparente y claro para la internalización de los costes medioambientales, asociados con la congestión y sanitarios que formarán la base para futuros cálculos de las tasas por el uso de la infraestructura. En este contexto, la Comisión debe poder proponer un modelo, acompañado por un análisis de las repercusiones de la internalización de los costes externos para todos los modos de transporte”.