Pradales puso de relieve que las tres vías de peaje de la red foral han experimentado este año aumentos de tráfico, del 8,97% en el caso de la AP-8, del 7% en la Supersur y del 4,35% en los túneles de Artxanda, lo que relacionó con la mejora de la situación económica.En cuanto a la Supersur, el diputado vizcaíno de Promoción Económica destacó que entre septiembre de 2011, cuando se abrió, y el mes de noviembre de 2017 han circulado por ella más de 27,8 millones de vehículos, de los que casi un 25% (6,8 millones) han sido camiones, lo que ha permitido evitar que ese tráfico pesado atravesase Bilbao por la AP-8.El tráfico de camiones en la Supersur ha crecido este año más de un 9%. Dada la fuerte incidencia que los vehículos pesados tienen en el nivel funcional de esta vía, se ha producido la desaparición de los periodos congestivos de la denominada solución Sur, cuando anteriormente la A-8 funcionaba gran parte del día a plena capacidad, con caravanas continuas de vehículos y frecuentes paradas a consecuencia de la congestión circulatoria, y donde los vehículos pesados eran una parte importante del problema.
Calidad de la red viaria
Es decir, el tramo en servicio de la Variante Sur Metropolitana está cumpliendo ya uno de los principales objetivos previstos, que es el de constituir una vía alternativa a la A-8, que desvíe una parte importante del tráfico de paso y permita acceder con mayor fluidez a Bilbao.Según la última encuesta de la Diputación Foral de Bizkaia sobre la percepción de los conductores sobre la calidad de la red viaria del territorio, la Supersur recibe una valoración general de 6,4 puntos y calificaciones superiores en conceptos como seguridad (9,6), rapidez (9,3), estado del firme (8,9) o baja accidentalidad (8,6). Además, en cuanto al motivo por el que se escoge esta vía, la rapidez sobresale sobre todos los demás.