El detonante fue la emisión en la televisión de aquel país de un reportaje que revela las condiciones de cuasi esclavitud que padecen los empleados de las principales compañías del sector. El 90% de los cerca de 77.000 conductores que trabajan en ellas proceden de países que no forman parte de la Unión.
Cabe recordar que el Parlamento Europeo votó el 8 de julio de 2020 el llamado “Paquete de Movilidad”. Este paquete legislativo está compuesto por dos reglamentos y una directiva que regulan las condiciones que deben aplicarse al desplazamiento de conductores, los tiempos de descanso y la adaptación y condiciones de acceso al mercado vista la evolución del sector (básicamente las reglas anti empresas buzón).
Según Izaskun Bilbao, “el nuevo marco legal mejorará la vida de los conductores, acabará con el dumping en el sector, permitirá aprovecharlas mejores cualidades que ofrece el transporte por carretera a la movilidad y supone un avance hacia un transporte más sostenible. Las nuevas normas van a permitir que los camiones aporten lo mejor que tienen, flexibilidad y capilaridad, a la logística europea. Van a ayudar además a digitalizar el sector y hacerlo más sostenible, más eficiente y más competitivo. Porque ajustarán mejor sus virtudes a las necesidades de movilidad.
Directiva sobre desplazamiento
El proceso seguido para aprobar este paquete fue largo y trabajoso pues en el debate debieron armonizarse posiciones contrapuestas que tenían componentes geográficas y de modelo empresarial. Los intereses de las grandes compañías eran distintos que las de los conductores autónomos. Lo mismo ocurría con las compañías radicadas en los países periféricos y los del centro de Europa. Finalmente, este complejo esquema se completaba con las diferencias en las condiciones del mercado de trabajo entre muchos de los nuevos socios de la Unión, antiguos países del Este.
El nuevo marco legal aspira a mejorar la vida de los conductores, acabar con el dumping en el sector, aprovechar las mejores cualidades que ofrece el transporte por carretera a la movilidad y avanzar hacia un transporte más sostenible.
Así, la directiva sobre el desplazamiento de los conductores pretende mejorar las condiciones de trabajo de estos profesionales y ofrece soluciones al principal problema que afecta al sector, el dumping social, que conduce al subempleo y degrada las condiciones de trabajo.
Como señala Bilbao, las nuevas normas plantean una serie de medidas para acabar con las “empresas buzón” una de las claves de las prácticas de dumping que tanto han perjudicado las condiciones de trabajo de los conductores. Para ello, las empresas serán obligadas a acreditar mediante cuestiones como la localización de sus bases logísticas y hangares, que su actividad principal se desarrolla en el Estado miembro en el que están registradas. Cada ocho semanas los vehículos deberán además volver a su base operativa.
El nuevo marco legal mejorará la vida de los conductores, acabará con el dumping en el sector, permitirá aprovecharlas mejores cualidades que ofrece el transporte por carretera a la movilidad y supone un avance hacia un transporte más sostenibleIzaskun BilbaoEurodiputada
Izaskun Bilbao Eurodiputada