El 10% de las escalas de cruceros en el Puerto de Barcelona serán de GNL en 2020
El Puerto de Barcelona desembarca en la feria Seatrade Europa con una interesante noticia: “En 2020, un 10% de las escalas de cruceros serán de GNL”, avanza a este Diario Mar Pérez, jefa de Cruceros del Puerto de Barcelona, “estamos muy centrados en la sostenibilidad, de hecho, el Plan Estratégico apuesta por ella en todos los ámbitos (en el medioambiental, el social y el económico) y el tráfico de cruceros es una parte muy importante de este programa”.
- 12 septiembre 2019 01:00
- Última actualización
11 septiembre 2019 18:27
El enclave, referente en sostenibilidad gracias a su apuesta por las nuevas tecnologías y por los esfuerzos realizados para impulsar el uso del gas natural licuado (GNL) tanto en la operativa marítima como en la terrestre, realiza actualmente varios estudios enfocados en conocer la realidad de los nuevos modos de abastecimiento de energía tales como la electrificación y las energías renovables (eólica y solar). “En el encuentro de CLIA -celebrado en el marco de la feria- se ha estado hablando precisamente de la capacidad de los cruceros de operar en GNL y en poder conectarse a la red en sus estancias en puerto; nosotros estamos ya con la electrificación para poder estar ahí en un futuro próximo. Por eso estamos realizando estudios”, añade la jefa de Cruceros.
La gran escenificación de la apuesta del Puerto de Barcelona por atraer a los buques de cruceros más modernos que son, por ello, más respetuosos con el medioambiente, se vivió hace unos meses cuando escaló en el enclave el “AIDAnova”, propulsado con GNL. “Escaló y fue atendido perfectamente, el año que viene tendremos que seguir demostrándolo porque el 10% de las escalas de cruceros que tendremos serán de GNL”, confirmó Pérez. Para alcanzar esta cima, “hemos hecho un esfuerzo para llegar a tiempo, para reducir al máximo las emisiones contaminantes”, asevera la jefa de Cruceros.
Valor económico
Por otro lado, la responsable de cruceros no quiso dejar pasar la oportunidad de recordar que la actividad genera unos beneficios económicos palpables y no sólo en la ciudad, sino en la provincia y en el país.
De hecho, recordó alguno de los resultados del estudio de Impacto del Puerto tales como que el Puerto genera 9.000 puestos de trabajo a tiempo completo o que con una facturación de 1.083 millones de euros al año, supone 562 millones del PIB. “El impacto económico está claro”, indicó, y hay que recordar que el estudio también confirmó que al ser home port los beneficios son más porque los pasajeros pasan alrededor de tres días en el destino si el puerto base en Barcelona con lo que hacen gasto y en mayor cantidad que un turista convencional. Por ello, el crecimiento del puerto debe de ir de la mano de la sostenibilidad y la colaboración con los sectores: de la ciudad como el Ayuntamiento, el Aeropuerto y las navieras.
Sobre las cifras de tráfico de cruceros, el Puerto de Barcelona cerrará 2019 con alrededor de 840 escalas, número que espera mantener durante 2020.