El objetivo del contrato es realizar un estudio sobre una nueva línea ferroviaria entre Bilbao y Santander, que mejore los servicios existentes a día de hoy y que resulte competitiva con los desplazamientos por carretera. Como criterio de diseño se considerará que la línea debería ser apta para tráfico mixto de viajeros y mercancías y se procurará, siempre que sea posible, que las alternativas planteadas incluyan parada tanto en Castro Urdiales como en Laredo.
El contrato se divide en tres fases bien definidas. La primera, se centra en un estudio inicial de alternativas y su examen técnico, ambiental y de viabilidad. Como resultado del mismo, las alternativas que se consideren viables en esta primera fase, serían desarrolladas en una segunda fase, que incluiría también el correspondiente estudio de impacto ambiental. La tercera fase incluiría el apoyo en los trámites a los que deba someterse el estudio, como los de información pública y audiencia a las Administraciones.