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Almacenes inteligentes: Hoy es el futuro

Desde el año 2016, la tendencia a la automatización y robotización de almacenes y plataformas logísticas ha ido en aumento. Aunque la irrupción del Covid-19 ha sumido en cierto letargo a esta industria, lo cierto es que el mundo post-Covid-19 va a acelerar en los próximos años este proceso. Con un volumen global de mercado que alcanzará los 27.000 millones de dólares para 2025, según la consultora Logistics IQ, estos almacenes se han convertido en la apuesta de aquellas compañías que quieren optimizar sus procesos.

  • Última actualización
    15 enero 2021 13:50

Aunque no lo parezca, la automatización y robotización de almacenes y plataformas logísticas es un sector de actividad casi inabarcable. El papel jugado por las nuevas tecnologías y la apuesta hecha sobre todo por grandes empresas y operadores logísticos ha hecho que este mercado haya pasado de ser una herramienta al servicio de terceros a un fin en sí mismo. Por ello, antes de entrar a hablar de lo que es un almacén inteligente, sería conveniente diferenciar entre éste y uno automático que, aunque pueden parecer lo mismo, no lo son tanto.

Las instalaciones automáticas permiten gestionar y optimizar los procesos derivados del almacenaje, preparación y expedición de mercancías. Su principal característica es que, a pesar de los avances tecnológicos, el factor humano sigue pesando en la organización de la plataforma.

El almacén inteligente, por el contrario, es una evolución del primero, ya que la mayoría de los procesos logísticos son ejecutados por robots o equipos de manutención automáticos, dirigidos por un software y complementados con tecnologías avanzadas como el machine learning, la inteligencia artificial, el Big Data, la realidad aumentada o sensores conectados de IIOT (Internet de las Cosas Industrial).

La primera y gran diferencia es que, gracias a esa masiva incorporación de tecnologías disruptivas, se pueden suprimir las tareas más repetitivas, facilitando que los operarios se centren en operativas que añadan valor al producto.

Además de sustituir los equipos de manutención convencionales, como las carretillas elevadoras, los almacenes inteligentes operan bajo el control de un software de gestión de almacenes (SGA). Es este sistema quien dirige a los operarios y equipos de manutención en procesos como la recepción de mercancías o la preparación de pedidos, consiguiendo optimizar los recursos de la plataforma.

En un almacén inteligente, la mayoría de los procesos logísticos son ejecutados por robots o equipos de manutención automáticos, que están dirigidos por un software y complementados con tecnologías avanzadas como el machine learning, la inteligencia artificial, el Big Data, la realidad aumentada o sensores conectados de IIOT (Internet de las Cosas Industrial)

Pros (y algún contra)de los almacenes inteligentesToda aquella empresa u operador logístico que ha decidido pasar de un almacén convencional a una plataforma inteligente ha comprobado de primera mano los beneficios que comporta esta evolución, que podrían resumirse en estos diez:1.- Optimización de los recursos en el almacén.2.- Incremento de la productividad, gracias al aumento de ciclos de extracción y depósito de mercancías.3.- Disponer de un inventario permanente y KPIs logísticos en tiempo real.4.- Eficiencia en la preparación de pedidos gracias a la optimización de las rutas de picking.5.- Mayor fluidez en los procesos logísticos.6.- Mejora de la seguridad para empleados, sistemas de almacenaje y mercancía.7.- Optimización de la capacidad de almacenaje de la instalación.8.- Control total del estado de la mercancía.9.- Previsión de la demanda más precisa.10.- Trazabilidad de producto automatizada y exhaustiva.Sin embargo, llegar a esta situación no es gratis. De hecho, la principal desventaja es la elevada inversión inicial que suponen tanto los sistemas de almacenamiento automáticos como la implantación del software (SGA) que controle esa maquinaria.Según el fabricante Mecalux, el retorno de la inversión de un proyecto de estas características oscila entre los 4 y los 7 años (un tiempo que va a depender del país en el que se quiera implantar esa tecnología y el sector en el que se vaya a trabajar), mientras que la implementación del SGA no debería superar los 18 meses.A esto hay que añadir el coste -tanto en dinero como en tiempo- de formación a los operarios, que se ven obligados a adaptar su actividad para combinarse con los equipos de manutención robotizados.

EL DATO

27.000 millones de dólaresEl volumen global de mercado de la automatización alcanzará los 27.000 millones de dólares en 2025, según la consultora Logistics IQ

Los cuatro pilares de un almacén inteligenteAutomatizaciónLa seña de identidad de un almacén inteligente es la sustitución del trabajo manual por el robotizado. A partir de este axioma, se abre un abanico casi infinito y que contempla desde transelevadores, para agilizar la extracción y ubicación de la mercancía, hasta robots colaborativos (cobots) que aceleren los procesos de picking.

Tecnologías disruptivasLa otra gran característica de una plataforma logística inteligente es la implementación constante de nuevas tecnologías. Las más comunes son la combinación de inteligencia artificial y el Internet de las Cosas (AioT) -pensadas para los almacenes sin operarios o dark warehouse- y el Big Data, para recopilar el análisis de los datos.

SoftwareEsa nueva maquinaria que se convertirá a partir de ahora en parte de la plataforma logística necesita un software que la guíe. Su implementación es esencial para garantizar un control íntegro del stock y, sobre todo, asegurar la trazabilidad del producto. Existen múltiples aplicaciones que, sincronizadas con el ERP (software propio) de la compañía, permiten dotar de eficiencia a todos los procesos.

RadiofrecuenciaLos sistemas de identificación por radiofrecuencia (RFID) son cada vez más comunes en los almacenes inteligentes. El uso de ondas de radio permite situar el stock de manera inmediata sin necesidad de llegar a leer las etiquetas de cada producto. Sin embargo, este requisito no es del todo imprescindible, ya que en la actualidad muchos almacenes funcionan con códigos de barras.