Se trata, añadió, de una reclamación por parte del sector de transporte de mercancías, “el cual no puede quedar desatendido” y podrá conocer cómo se desarrollarán los posibles cambios en las restricciones “en función de la tecnología, como por ejemplo qué etiqueta caducará y cuándo”.
La previsión es dar a conocer un primer borrador del calendario, que Carles Conill define como “necesario”, durante los últimos meses de este año, ya que las primeras reuniones entre las administraciones tendrán lugar el próximo mes de septiembre. De esta manera, y para su elaboración, “consultaremos y trabajaremos con el sector del transporte de mercancías”, aseguró el director de Servicios de Movilidad Sostenible de AMB.
Aunque a día de hoy “no contamos con un calendario más preciso, reconocemos la necesidad, y lo comunicaremos, porque es una decisión importante, tanto para el sector como para la ciudadanía, el hecho de conocer qué vehículos, profesionales y personales, pueden adquirir”, esclareció Conill.
Por su parte, Marc Iglesias, responsable de proyectos de movilidad sostenible de AMB, incidió en que las administraciones cuentan con el sector. “Cualquier foro, reunión, grupo de trabajo. Estamos permanentemente en diálogo con el sector y contamos con ellos en las decisiones y opiniones, como el uso de filtros, las subvenciones, las aplicaciones, todos los elementos que se van proponiendo se hacen en consenso con el sector y con el conjunto de las administraciones”, señaló.
El sector de transporte de mercancías “no puede quedar desatendido” de tal forma que podrá conocer cómo se desarrollarán los posibles cambios en las restricciones “en función de la tecnología”
Filtros
Una de las opciones que las empresas del sector del transporte de mercancías tienen encima de la mesa, con las dificultades que acarrea, es el uso de filtros, los cuales tienen como función limpiar el aire que circula.
“En el Ayuntamiento de Barcelona y AMB estamos trabajando intensamente para tener esta solución. Estamos trabajando con el Ministerio de Industria y la Dirección General de Tráfico (DGT) para poder encontrar la solución a los filtros para que se acojan a los requerimientos de etiquetaje de la DGT y de la ZBE”, explicó hoy Marc Iglesias.
Sin embargo, se trata de una alternativa que tiene “la dificultad de llegar a una solución que ofrezca la garantía de calidad del aire y que, a su vez, el coste sea competitivo”, recordó Carles Conill. De este modo, “en cualquier opción factible debe tenerse en cuenta el coste, por lo que debemos encontrar un equilibrio y que, a la vez, las tecnologías lo permitan”, añadió Conill.
“Estamos trabajando con el Ministerio de Industria y la DGT para poder encontrar la solución a los filtros para que se acojan a los requerimientos de etiquetaje”
Asimismo, Marc Iglesias apuntó que la AMB y el Ayuntamiento, “implicados en la necesidad”, recogen las inquietudes del sector “y estamos haciendo los pasos necesarios para que esta alternativa comience a estar articulada”, a lo que añadió que “la barrera que tenemos o tendremos es encontrar una solución que permita que sea económicamente viable”.
Por ello, y al menos de momento, las administraciones no contemplan una ampliación de la moratoria para el sector. Condicionado por las circunstancias del coronavirus, “el régimen jurídico está bastante definido y a partir del 1 de abril de 2021 comenzarán las sanciones para las furgonetas comerciales N1 y a partir del 1 de julio de 2021 para los camiones (N2 y N3) “, recordó Iglesias.
Sin embargo, y a pesar de que estas directrices son las que están programadas, “pueden pasar muchísimas cosas que puedan desviar este objetivo”, reconoció Marc Iglesias.
Carles Conill, director de Servicios de Movilidad Sostenible de AMB. Marc Iglesias, responsable de proyectos de movilidad sostenible de AMB. Acompañar la adaptaciónUno de los elementos que contempla la hoja de ruta de la ZBE es acompañar su desarrollo con medidas de apoyo a la adaptación.
Por una parte, Marc Iglesias destacó las subvenciones con las que ya trabaja AMB para los vehículos comerciales para autónomos (N1), que “prevé un presupuesto, hasta el 2023, de 1,2 millones de euros”. En función de la categoría del vehículo y los ingresos anuales se destinará una cantidad determinada y, además, “la ayuda no es universal: está destinada al colectivo de furgonetas y camiones ligeros de transporte”, entre otros requisitos.
Por otra parte, Iglesias recordó las ayudas estatales, como el Plan Moves o el programa de renovación del parque de vehículos.
Asimismo, Marc Iglesias también destacó la aplicación SPRO que lanzó recientemente AMB y el Ayuntamiento de Barcelona para gestionar y optimizar los espacios destinados a la carga y descarga de la Distribución Urbana de Mercancías (DUM) y “avanzar así en una movilidad más eficiente y sostenible”.