La Zalia todavía no tiene actividad, así que los técnicos van a iniciar la revisión del plan especial para liberar parte de los terrenos sin que los cambios afecten al proyecto.
El consejero de Infraestructuras del Principado de Asturias, Juan Cofiño, reconoce que la situación financiera de la Zalia es difícil. Acumula una deuda de 115 millones de euros y una de las soluciones pasa por reforzar su estructura societaria con un socio adicional público o privado.
Interés de empresas
El consejero ha confirmado que existen empresas interesadas en instalarse en la zona, pero las parcelas todavía no se pueden comercializar porque hay que rematar la urbanización y lo más urgente, construir una subestación eléctrica. Esa inversión supera los 14 millones de euros. De momento el proyecto industrial más avanzado es la planta de biomasa de la gallega Greenalia, que se encuentra en fase de estudio ambiental y para la que Cofiño ya ha adelantado que habrá bastantes alegaciones. La primera fase de la Zalia ocupa 700.000 metros cuadrados de suelo.