Conesa y Saura celebraron el pasado martes una reunión en la que este proyecto tuvo un papel estrella. La presidenta del Puerto de Barcelona también trasladó al secretario de Estado de Infraestructuras la necesidad de “agilizar la solución técnica” que permita concluir las obras de dichos accesos, largamente reclamados desde la capital catalana.
La urgencia del Puerto de Barcelona de contar con estos accesos, que acumulan años de retraso, es tal que incluso la propia autoridad portuaria se ha ofrecido a hacerse cargo de la gestión de las obras, además de financiar buena parte de las mismas.
La reunión entre Mercè Conesa y Pedro Saura tuvo lugar tras la conferencia que el secretario de Estado pronunció el pasado martes en Barcelona invitado por el Cercle d’Infraestructures. Durante este acto, la presidenta del puerto catalán también solicitó al representante del ministerio de Fomento “acompañamiento para la aplicación del nuevo reglamento de puertos” europeo así como “diálogo” entre administraciones, aunque en este aspecto Mercè Conesa reconoció que “el que tenemos en este momento lo agradecemos muchísimo”.
El secretario de Estado de Infraestructuras se mostró receptivo ante las demandas de la presidenta de la Autoridad Portuaria de Barcelona (APB) y reconoció que Catalunya tiene un papel prioritario en su agenda. Y también en la del Gobierno. En este sentido, Pedro Saura recordó que en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2019 la inversión prevista en Catalunya suma 1.857 millones de euros, un 57,1% por encima de los 1.193 millones de euros de los PGE 2018, es decir, 682 millones de euros más. Además, el Gobierno contempla una partida extra de 200 millones para ir liquidando la deuda derivada de la disposición adicional tercera del Estatut.
El secretario de Estado de Infraestructuras añadió que la inversión prevista en los PGE 2019 “va a suponer unos 55.000 puestos de trabajo” entre directos e indirectos en Catalunya. Saura dio relevancia al hecho de que el cambio de rumbo del nuevo Gobierno ya se dejó notar en el último semestre de 2018, cuando se licitaron 574 millones de euros en Catalunya, un 24% más que en igual periodo de 2017.