Desde su creación a principios de 2022, Correos Frío no ha parado de crecer hasta posicionarse, tanto a nivel de marca como de calidad de servicio, dentro de los sectores farmacéutico y de alimentación.
MADRID. “Este más de año y medio nos ha permitido consolidar una apuesta de valor integral para todos nuestros clientes, que se ha visto reflejada en el nivel de facturación y de clientes nuevos que han entrado en cartera”, explica a este Diario el Supply Chain Manager de Correos Frío, Jorge Chamero Muñoz.
En concreto, esta unidad de negocio de Correos ha crecido “a más de doble dígito” en comparación con el año anterior, “teniendo en cuenta que todavía queda el último trimestre del año, en el que se prevé un aumento sustancial de la operativa”, apunta Chamero Muñoz. “Estamos bastante satisfechos con el inicio de esta unidad de negocio y esperamos seguir así de cara 2024”, destaca.
De hecho, la compañía se encuentra inmersa en un proceso de expansión y de captación de nuevos clientes. En este sentido, Correos Frío está en negociaciones para el cierre de un contrato con un cliente del sector farmacéutico “que ampliará la operativa de forma considerable”.
Correos Frío cuenta con dos grandes líneas operativas. Por un lado, el frío activo, que cuenta con una red de distribución a lo largo y ancho de toda España tanto en vehículos capilares como de mayor tamaño.
Por otro lado, también trabaja el frío pasivo, con embalajes isotermos que garantizas la cadena de frío hasta cinco días.
Tanto una tipología como otra cuentan con sensores homologados que permiten a Correos y al cliente saber en tiempo real el estado del producto, ya que permite conocer la temperatura, la humedad y otros valores como los niveles de C02 u O2 e incluso golpes en los contenedores.
Los sensores homologados permiten a Correos y al cliente saber en tiempo real el estado del producto
“Esto nos otorga seguridad y capacidad de ser proactivos ante cualquier incidencia que pueda ocurrir. Esta proactividad que nos dan los sensores nos permite hablar con nuestros clientes antes de que el producto llegue a su destinatario, minimizando así cualquier riesgo que pueda haber con ese productos”, apunta Chamero Muñoz.
Además de ofrecer estos servicios a empresas, Correos Frío ha abierto un canal para particulares.
“Muchos usuarios necesitan mover elementos en frío y hasta la llegada de Correos Frío no contaban con una solución en el mercado que les permitiera hacerlo con garantías”, explica.
EL DATO
100
Vehículos de frío activo. Correos Frío cuenta con una veintena de vehículos de frío activo. El objetivo es terminar el primer semestre del año que viene con una flota cercana a los 100 vehículos distribuidos a lo largo de todo el territorio.
Actualmente, toda la operativa de Correos Frío está centralizada en Madrid, donde se mueven 1.000 contenedores de frío pasivo, con una rotación muy alta. Gracias al crecimiento que ha experimentado esta unidad de negocio de Correos, para finales de año se prevé la puesta en marcha de un nuevo centro operativo en Barcelona, que funcionará como una réplica del centro madrileño. El objetivo de este nuevo centro es reforzar la operativa de Correos Frío, cuya cobertura es nacional. “Aunque la gestión esté centralizada en Madrid y Barcelona, esto no quita que tengamos oportunidades de negocio en otros puntos y que el núcleo logístico de Correos pueda posicionar cualquier elemento que necesite nuestro cliente en cualquier punto de España”, detalla Chamero.
“Estamos bastante satisfechos con el inicio de esta unidad de negocio y esperamos seguir así de cara 2024”
Apuesta en firme por la logística del frío del futuro
El año 2023 le ha servido a Correos Fríos, además de para consolidarse, para seguir apostando por la innovación y el desarrollo de nuevas soluciones que verán la luz a lo largo de 2024. “Estas soluciones pasan por ofrecer una propuesta de valor integral a todos aquellos clientes que están trabajando con nosotros y a los que todavía no lo hacen”, explica el Supply Chain Manager de Correos Frío, Jorge Chamero Muñoz, quien especifica que “estas soluciones nos van a permitir abarcar más parte de toda esa cadena de valor en la que todavía no estamos trabajando”. Para ello, Correos Frío ha aprovechado 2023 para hacer los desarrollos e investigaciones para, en el año 2024, poder ofrecer este tipo de servicios.
En este sentido Correos Frío trabaja en la actualidad en diferentes proyectos tanto a nivel nacional como internacional. “Se está elaborando la apuesta por la logística del frío del futuro”, apunta Chamero, quien destaca el nivel medioambiental, a través del uso del frío pasivo. “Uno de los principales desarrollos va a ser posicionar mercancía de gran volumen fuera del territorio nacional con frío pasivo. Esto es algo que actualmente no existe en el mercado y que va a permitir que tanto nosotros como los clientes minimicemos costes, no solo en el tema energético, sino en las pérdidas que originan los sistemas actuales de frío”, detalla, y añade que “todos estos nuevos sistemas que estamos desarrollando, y que ya hemos hecho diferentes pruebas, permitirán reducir el impacto económico y el desperdicio alimentario”.
Las cajas isotérmicas de Correos Frío son una solución reutilizable con cero impacto ambiental, “lo que todos los clientes agradecen porque las otras soluciones dejan una huella de carbono muy alta”. Por ello, “esta solución está teniendo muy buen encaje y sobre todo los sensores, que aportan un nivel de seguridad que nuestros clientes valoran”.
