“En Schenker trabajamos a gran ritmo en logística sostenible e innovadora, para lo que la conducción autónoma será cada vez más importante. Junto con Einride, queremos traer en un futuro cercano el primer camión autónomo y completamente eléctrico a las carreteras públicas, estableciendo así nuevos estándares para la logística del futuro”, explicó Jochen Thewes, CEO de DB Schenker.
“El transporte de mercancías por carretera es responsable de una buena parte de las emisiones globales de CO2. Al sustituir la electricidad por diésel, reducimos las emisiones de CO2 en un 90%. Estamos felices y agradecidos de que DB Schenker haya elegido ser parte de esta revolución, abriendo un enorme mercado global”, dijo Robert Falck, CEO y fundador de Einride.
Funcionamiento con baterías
El T-pod de Einride no tiene cabina de conducción, pero está supervisado y puede ser teleoperado por un operador humano, desde cientos de kilómetros de distancia. Al carecer de cabina ofrece una mayor capacidad de carga, mayor flexibilidad, menores costos de producción, menores costos de operación y consumo de energía optimizado, lo que permite que el T-pod funcione solo con baterías.
Una flota de T-pods puede ser coordinada por un sistema de enrutamiento inteligente, optimizando el tiempo de entrega, la vida útil de la batería y el consumo de energía, haciendo que el transporte de mercancías por carretera sea lo más eficiente posible. Einride y DB Schenker iniciaron su asociación el pasado mes de abril. El acuerdo incluye el piloto en Jönköping y una opción para pilotos adicionales a nivel internacional.