Dentro de su política de Responsabilidad Social Corporativa (RSC), de prevención de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales y de protección y potenciación de la salud de su plantilla y de las personas que visitan sus instalaciones, DOCKS ha incorporado recientemente en las delegaciones de Algeciras, Tenerife y Valencia desfibriladores externos automatizados (DEA).
Coincidiendo con el Día Mundial de la Seguridad y Salud en el Trabajo que se celebra hoy, DOCKS explica que los desfibriladores automáticos detectan el ritmo cardiaco susceptible de desfibrilación e indican, mediante señal luminosa y acústica, el uso de una descarga eléctrica para revertir dicha situación de emergencia, la cual si no es resuelta en pocos minutos, puede llevar a la muerte de la persona.
“Estos dispositivos de desfibrilación automática incluyen un software con geolocalización y de llamada al 112, que nos sirve de soporte y ayuda, para conectar de forma rápida con los servicios de emergencia”, comenta la compañía.
La instalación de los tres equipos en sus centros de trabajo ha conllevado que se esté formando de manera progresiva a todo el personal de DOCKS en técnicas de reanimación cardiopulmonar (RCP) y uso eficiente del desfibrilador externo automatizado, para saber cómo actuar de manera rápida y eficaz ante una persona en situación de parada cardiorrespiratoria.
“La decisión de instalar desfibriladores automáticos en nuestras instalaciones se debe a que estos dispositivos son decisivos para la recuperación de una parada cardiorrespiratoria, aumentando las probabilidades de supervivencia y sobre todo la calidad de vida tras sufrir algún evento cardiaco, de las personas que visitan nuestras instalaciones y de nuestro equipo, estando a disposición de uso de cualquier persona que lo necesite en el entorno de nuestra organización”, subraya DOCKS.
Esta acción refuerza la cultura corporativa de la compañía que incluye la responsabilidad social como una de sus claves para potenciar su contribución al desarrollo sostenible.