Según explica la APBA, en las últimas semanas se ha incorporado personal al puesto de inspección y la plantilla está completa. No obstante, la APBA ha solicitado su ampliación “para hacer frente al continuo crecimiento de este tipo de tráfico” que en 2019 ha sido del 11%.
Informe desfasado
Por otro lado, la APBA destaca que el informe que cita CETM publicado en marzo de 2019 por la propia APBA y que, según CETM “evidencia que los retrasos se deben a la gran acumulación en la gestión de expedientes por parte del organismo de Sanidad Exterior y, en consecuencia, se está produciendo el desvío de los tráficos a puertos de Portugal y del norte de Europa”, “es de hace un año y no refleja la situación actual”.
“Entendemos que CETM se refiere a la situación puntual de Navidad en la que al pico de actividad se unieron los días que no se trabaja por 24 y 31, y sobre todo, al temporal que mantuvo cerrado el puerto tres días justo antes del 24 de diciembre”, comenta la APBA.
Nuevo Reglamento Comunitario
Asimismo esta situación coincidió con la entrada en vigor, el pasado 14 de diciembre, del Reglamento Comunitario 2031/2016 que, desde entonces, “ha incrementado en un 30% de media la carga de trabajo en Sanidad Vegetal al obligar el control fitosanitario a todos los productos vegetales salvo el coco, la banana, la piña y el durazno”, confirma el Puerto
Así las cosas, este crecimiento “obliga a reforzar la plantilla de inspectores y administrativos del PIF para evitar nuevas situaciones de retraso, poder dar servicio mañana y tarde”, detalla la APBA que ya ha trasladado a la Administración competente todas estas necesidades.
Por su parte, el presidente de CETM Frigoríficos ha enviado una carta a Mercedes Gómez Álvarez, directora general de Transporte Terrestre, para pedirle que ponga solución a los retrasos que viven los transportistas en el puerto.