La conselleria de Innovación, Industria, Comercio y Turismo de la Generalitat Valenciana trabaja, en colaboración con el Instituto de Tecnología Cerámica (ITC), ASCER y ANFECC, en alternativas energéticas y en tecnologías para lograr una producción sostenible.
castellón. El director general de Industria, Manuel Rosalén, intervino hace unos días en el XVIII Congreso Mundial de Calidad del Azulejo y del Pavimento Cerámico, Qualicer, que se celebró en Castellón y reunió a fabricantes de pavimentos y revestimientos, maquinaria y bienes de equipo y fritas, colores y esmaltes.
Rosalén recordó que el cerámico es uno de los principales clústeres de la economía valenciana (representa el 75 % de las exportaciones de la provincia de Castellón) y que es primordial, para ganar estabilidad económica, bienestar y cohesión social, “tener una industria potente, digitalizada, verde y descarbonizada”, por lo que, “una de las líneas estratégicas de trabajo del gobierno valenciano para estos próximos cuatro años será aplicar políticas que fomenten la inversión por parte de las empresas en innovación, nuevas tecnologías y conocimiento, lo que redundará en una economía más competitiva. Por ello, en la nueva estrategia de reindustrialización de la Comunitat Valenciana 2024-2028 que vamos a poner en marcha, incidiremos en el impulso de la I+D+i, el desarrollo de una política de clústeres, los polígonos industriales, la internacionalización, la innovación tecnológica y la transición energética en favor de las renovables y de la economía circular”.
“Se espera que el hub de Castellón será global y referente para la descarbonización”
Además, la Conselleria ya está trabajando, en colaboración con el ITC, ASCER y ANFECC, en alternativas energéticas y en tecnologías hipocarbónicas para alimentar a los hornos, como el hidrógeno verde, la inducción y la electricidad. “De hecho, el ITC cuenta con la primera planta hipocarbónica equipada con tecnologías de vanguardia para estudiar la viabilidad de que las empresas del sector cerámico utilicen en sus procesos de fabricación energías limpias en sustitución de combustibles fósiles, una iniciativa financiada por el Instituto Valenciano de Competitividad e Innovación (Ivace +I) con cerca de un millón de euros y con cofinanciación europea”, afirmó Rosalén.
Con este tipo de actuaciones, “se espera que el hub de Castellón será global y referente para la descarbonización, favoreciendo no solo a la industria cerámica, también a la industria química, la textil o el transporte pesado”, concretó el director general. “Seguiremos potenciando el sector cerámico de Castellón y buscando soluciones en las amenazas que puedan frenar su competitividad”, concluyó.
