Las compañías especializadas en este nicho de mercado brindan servicios logísticos integrales a clientes que necesitan trasladar equipos y piezas extradimensionadas y de gran peso que no son compatibles con el espacio que ofrece el transporte marítimo convencional. Por regla general, las transitarias y operadores logísticos dedicados al Project Cargo están especializados en sectores como Energía, Petroquímica, Ingeniería, Bienes de equipo y otras áreas de actividad repartidas por los cinco continentes. Las extremas situaciones que frecuentemente concurren en la manipulación y el transporte de este tipo de cargas precisan de soluciones logísticas creativas y altamente complejas.Todo ello constituye un reto por sí mismo, ya que cada carga es diferente y exige la coordinación de todos los elementos y participantes desde grúas y sus operadores, estibadores, agentes de aduanas, ingenieros, supervisores, líneas navieras, etc. Como señala Paola Berard, directora de Cargas de Proyecto y Breakbulk de Tuscor Lloyds España, "cada proyecto representa actividades distintas pero, al mismo tiempo de ser un reto, resulta apasionante ver esos grandes proyectos moverse por todo el mundo y comprobar finalmente cómo se combinan en su destino final".Valor añadidoLa gestión de una carga de proyecto requiere de todas las cualidades y habilidades de una compañía o forwarder que gestione cargas de contenedores o "convencionales" (organización, capacidad de negociación, etc.) pero además tiene las dificultades añadidas de que requiere mayores conocimientos técnicos (pesos, resistencias, capacidades de grúas, barcos, etc.) y que nunca se repite: cada proyecto es diferente del anterior. Por ello, la experiencia y los conocimientos específicos del mundo de la carga de proyecto son un valor añadido muy importante para cualquier forwarder que vaya a gestionar dichas cargas. Para Markus Schaub, managing director de KOG Project Logistics, S.L., es indispensable poseer un contrastado know how, competencia en idiomas, experiencia laboral en otros países y continentes, conocimientos técnicos y de leyes, así como de los usos en diferentes puertos y países. "Y tener suficientes recursos para cuando se plantean situaciones nuevas y muy complicadas".En la carga de proyecto todas las partes integrantes de la cadena son igual de importantes dado que la cadena se rompe siempre por el eslabón más débil, por ello debe darse la misma importancia a todas las fases del proyecto si se quiere conseguir una operativa fluida y sin incidencias.Así, Markus Schaub concede especial importancia a la solución dedicada y su planificación detallada, y atribuye el 99% del éxito de un proyecto a la buena preparación. Por su parte, Paula Berard cree que a pesar de que mucha gente pueda darle todo el valor al transporte marítimo o terrestre, "los detalles de supervisión, de ofrecer soluciones integrales al cliente, el seguimiento y todas esas partes que se suelen subestimar en la logística, si se cuidan en la carga de proyecto, pueden hacer la diferencia entre unas empresas y otras".
Rentabilidad y preciosUn mercado tan exigente como el de la carga de proyecto tiene también sus recompensas. Y tal vez la principal de sus ventajas para quienes operan en él sea los mayores márgenes económicos en comparación con la gestión de carga contenerizada o regular, "a pesar de que dichos márgenes están disminuyendo", sobre todo por la entrada de más forwarders en este sector, como indican algunos expertos. En la misma línea de este razonamiento, Schaub justifica las mayores rentabilidades en el menor número de clientes y transportes efectuados, aunque los costes operativos sean "muy superiores" a los de un operador en el sector de contenedores, camión/ferrocarril o almacén".Por el contrario, la principal desventaja, ligada a lo anterior, es que también los riesgos son mayores, así como las necesidades de financiación. Según profesionales del sector consultados, un forwarder de carga de proyecto que flete un barco ‘heavy-lift' para una carga en concreto "se expone fácilmente a perder 20.000 euros por día si por cualquier motivo el barco queda parado en puerto sin poder cargar o descargar".Para la responsable de Tuscor Lloyds España las ventajas de operar este tipo de cargas depende de lo que espere cada forwarder, aunque valora de forma positiva la apertura al mercado y la posibilidad de ofrecer al cliente servicios integrales y no solo limitados a la carga regular de contenedores. El de la carga de proyecto es un mundo donde siempre hay algo nuevo que aprender y tratar con gente diferente de exóticos lugares. "También hay muchos riesgos -añade Berard- porque se trata de cargas muy valiosas y deben cuidarse hasta los más mínimos detalles". En este misma línea, Schaub considera que se trata de un segmento de negocio "reservado a competidores y ‘vendors' muy especializados; y expuesto a riesgos muy superiores, tanto económicos, legales como de terrorismo, secuestro, etc.".Como en casi todos los sectores, las cotizaciones en la carga de proyecto son "cada día más ajustadas", señalan algunos especialistas. Además del incremento de la competencia por la entrada de más forwarders en este tipo de carga, las empresas siguen considerando el transporte de sus mercancías como un costo, en lugar de un valor añadido, "por lo que ha sido una de las partidas en las que primero se fijan las empresas a la hora de ajustar costes", indican.Por su parte, el responsable de KOG Project Logistics, S.L considera que los precios a nivel mundial han estado en un situación baja desde 2009. "El mercado de proyectos se redujo en un 25-50% a nivel mundial -precisa- y para 2012-2014 se espera una mejora y aumento de proyectos y aumento de fletes".
España exportaLa deslocalización industrial y el crecimiento económico de los países emergentes está consolidando el eje que une Norteamérica, Oriente Medio y Extremo Oriente, fortaleciendo la posición de los países del Lejano Oriente, el Sudeste asiático e India, como áreas exportadoras y a Sudamérica, la Península Arábiga y Oceanía, como áreas importadoras. Asimismo, continúa estable el incremento de demanda de cargas de proyecto en los mercados de Brasil, India y otros países emergentes, como las antiguas repúblicas soviéticas euroasiáticas, cuyas economías crecen al ritmo de las importantes inversiones que están llevando a cabo.Por lo que a España se refiere, la directora de Cargas de Proyecto y Breakbulk de Tuscor Lloyds España, Paola Berard, cree que "a pesar de que últimamente ha decrecido el número de carga de proyecto desde España, aún sigue siendo un exportador interesante". Por el contrario, la importación está prácticamente paralizada, añade Berard, para quien "lamentablemente, es un mercado que se ha cerrado prácticamente por la crisis, pero al mismo tiempo le ha abierto las puertas a todas esas empresas que generaban materiales y equipo en España de moverse a nuevos lugares del mundo".De parecida opinión es el responsable de KOG Project Logistics, S.L., Markus Schaub, quien considera a España como un mercado "en contracción, a excepción de aquellas empresas que hayan ocupado una posición destacada a nivel mundial antes de la crisis de 2008".Sectores como el energético, petroquímico, Oil & Gas y construcción, entre otros, nutren principalmente el mercado del Project cargo y Heavy-lift, que ha visto un repunte en los proyectos relacionados con la Energía y concretamente con las energías limpias, como hace notar Paola Berard, quien destaca que dicho crecimiento se está desarrollando en América, algunos países asiáticos y Oriente Medio. Así, Norte de Europa, Japón, Estados Unidos y China se consolidan como mercados exportadores, mientras que Brasil, Canadá, Turquía, México, Chile, Indonesia e India lo hacen como importadores.Según otros operadores, son claramente los países de Sudamérica junto con Sudáfrica y otros países africanos donde más oportunidades se perfilan, en gran parte debido a su incorporación al primer mundo, con todo lo que ello conlleva en cuanto a necesidad de infraestructuras y equipos.