VALENCIA. Las concentraciones comenzaron este lunes ante las delegaciones de la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) de toda España, y han sido convocados por el sindicato Gestha.
Además de la paralización de la carrera profesional que afecta a todo el personal de la AEAT desde hace casi tres lustros (salvo unas medidas extraordinarias aprobadas en 2018 para evitar el colapso de la organización), Gestha llama la atención sobre varios problemas estructurales que atañen específicamente a los técnicos.
Estos profesionales han denunciado “el incumplimiento durante más de 17 años de la Disposición Adicional Cuarta de la Ley Antifraude de 2006, que obliga a la Administración a adecuar sus puestos de trabajo según la complejidad, dificultad y responsabilidad de sus tareas”, afirman desde el sindicato.
Además, los técnicos alertan sobre su “defectuoso encaje en la organización, pues perteneciendo al Grupo A y compartiendo funciones, responsabilidades y régimen de incompatibilidades con los inspectores, sus complementos específicos -como el componente salarial que retribuye la especial dificultad técnica, responsabilidad o incompatibilidad- están solapados con los de los agentes tributarios, que pertenecen al Grupo C y que están muy alejados del de los inspectores”.
Lo mismo ocurre con las productividades como el componente salarial que debería retribuir el especial rendimiento, actividad, interés o iniciativa, “que se concentran de forma desequilibrada en los inspectores sin tener en cuenta la efectiva aportación de los técnicos a la consecución de los objetivos de la Agencia Tributaria”, según Gestha.
Otro problema es la difícil movilidad geográfica de los técnicos, que contrasta con la facilidad de movimiento en otros cuerpos funcionariales de la Agencia Tributaria.