HELSINKI. Gracias a una amplia flota de más de 7.000 remolques, la empresa ofrece a sus clientes un nivel de flexibilidad y eficiencia sin parangón. El modelo único permite dejar los remolques en un puerto y recoger uno nuevo en el de destino, optimizando la rotación de la carga y reduciendo los tiempos muertos.
Este sólido servicio está disponible los siete días de la semana, garantizando unos plazos de entrega constantes que igualan a los de sus opciones de transporte exclusivamente por carretera, pero con unas emisiones de CO2 notablemente inferiores.
“Al transferir estratégicamente una parte de la carga por carretera en dirección de Finlandia a Alemania a través de rutas marítimas, no sólo aliviamos la presión sobre unas autopistas muy congestionadas, sino que también contribuimos significativamente a reducir las emisiones de CO2. Hasta ahora, con este nuevo servicio, hemos conseguido ahorrar más de 330.000 kg de emisiones de CO2, cubriendo 350.000 kilómetros”, explica Adele Lasionytė, responsable de la unidad de negocio de Girteka.
Además, el servicio pretende aumentar el confort y la satisfacción laboral de los conductores de Girteka. Al facilitar rutas más cortas y localizadas, Girteka no sólo reduce su impacto medioambiental, sino que también mejora las condiciones de trabajo de sus apreciados conductores.
“De cara al futuro, vemos un potencial considerable en la expansión de nuestros servicios multimodales e intermodales. A medida que aumenta la interconexión de las cadenas de suministro mundiales, estamos investigando activamente rutas adicionales para conectar el norte de Europa con otras regiones continentales. Esta estrategia se alinea con los objetivos de nuestros clientes, que van más allá de la descarbonización para abarcar la eficiencia global y los beneficios para las partes interesadas, ya sean clientes, socios o nuestro equipo, en particular, nuestros conductores. Este enfoque multifacético de la logística ejemplifica nuestro compromiso con las prácticas empresariales responsables”, resume A. Lasionytė.