El transporte frigorífico ha experimentado un gran crecimiento que ha otorgado a la logística refrigerada un gran impacto social al gestionar el transporte de alimentos o productos perecederos básicos para el consumo, haciendo también que cargadores y distribuidores refuercen su apuesta por prácticas más sostenibles y eficientes.
BILBAO. El transporte frigorífico ha experimentado un gran crecimiento que ha otorgado a la logística refrigerada un gran impacto social al gestionar el transporte de alimentos o productos perecederos básicos para el consumo, haciendo también que cargadores y distribuidores refuercen su apuesta por prácticas más sostenibles y eficientes.
Las empresas cargadoras y los grandes distribuidores de este tipo de productos, especialmente los hortofrutícolas, conceden un alto valor a la logística y contribuyen también a promover la innovación, digitalización y descarbonización como factores clave de competitividad para la cadena de valor completa del sector.
Estas empresas sostienen que el transporte sostenible de mercancías, en toda su dimensión, es esencial para construir un futuro próspero y equitativo para las generaciones presentes y futuras”.
Este compromiso de los cargadores con un modelo de transporte sostenible se recoge en un manifiesto elaborado por Transprime-Spanish Shippers’ Council y la Asociación de Cargadores de España (ACE) que fue presentado el pasado mes de abril en la primera Conferencia Nacional de Cargadores, celebrada en Madrid. Así, el manifiesto “Las empresas cargadoras por un transporte sostenible de mercancías” subraya el valor esencial del transporte sostenible de mercancías “para construir un futuro próspero y equitativo”.
Una voz propia y unificada
Las dos asociaciones de cargadores unidas alrededor de esta iniciativa pretenden ofrecer “una voz propia y unificada” para abordar tres grandes objetivos como son “detectar los puntos de estrés en la cadena de suministro” y, a partir de ahí, trabajar para mitigarlos; “generar consensos” entre todos los agentes intervinientes en la cadena logística, y colocar “la carga en el centro”.
Junto a estos principios, los cargadores destacan que, una vez detectados los problemas y consensuado las soluciones, será muy importante priorizar su implantación en función de las necesidades.
Ante la necesidad de actualizar una mirada enfocada sobre la logística desde el punto de vista único y exclusivo de las empresas cargadoras, éstas insisten en situar a la carga en el centro del universo logístico, como subraya el secretario general de Transprime, Jordi Espín: “En el centro no debe estar el cargador; en el centro de todo, lo que tenemos que colocar es la carga con el conductor al frente”.
Por su parte, la secretaria general de ACE, Nuria Lacaci, quien señala que la asociación está formada “por grandes compañías unidas para lograr un transporte de mercancías sostenible, moderno y eficiente”, destaca los ámbitos de actuación preferentes recogidos en el documento “Las empresas cargadoras por un transporte sostenible de mercancías”, comenzando por el compromiso con la sostenibilidad y la priorización del transporte sostenible de mercancías con prácticas y tecnologías que reduzcan las emisiones y promuevan la protección del medio ambiente.
Otro ámbito en el actúan los cargadores es en la “Certificación del cargador responsable” (CCR), impulsada desde Transprime y avalada por IRU
Diálogo y transparencia
La colaboración y el diálogo abierto son, asimismo, requisitos esenciales entre todos los agentes y actores para buscar soluciones colegiadas, al igual que la innovación y la tecnología son considerados por los cargadores como “pilares indispensables” para el transporte sostenible en todos sus eslabones logísticos, por lo que expresan su compromiso con el impulso de los mismos.
Además, consideran la eficiencia como la “fuente de energía más limpia”. Así, la optimización, minimización y concentración del producto, junto con la consolidación y la planificación eficiente son elementos que verificar con el establecimiento de “indicadores de compromiso”.
Los cargadores se comprometen también a ser transparentes en sus operaciones y a rendir cuentas de sus impactos sociales y ambientales, al tiempo que reconocen la importancia de educar y sensibilizar a todos los involucrados en la cadena de suministro sobre la importancia del transporte sostenible de mercancías. “Nos comprometemos a compartir conocimientos, mejores prácticas y lecciones aprendidas para inspirar a otros a unirse a estos valores”, expresan.
Así, desde el área de Cadena Agroalimentaria, que engloba los tres sectores de frescos (frutas y hortalizas, carnes y productos del mar), la patronal de cargadores AECOC trabaja “para acercar soluciones, estándares y conocimiento a las empresas, con el fin de impulsar la eficiencia, la sostenibilidad y la competitividad de todos los eslabones de la cadena de valor compartido de estos sectores, aportando mayor valor y trasparencia al consumidor”.
La dimensión social del transporte es, asimismo, también un aspecto muy tenido en cuenta, por lo que los cargadores reiteran su compromiso a diseñar y generar cadenas de suministro éticas, con respeto a los derechos humanos, la equidad de género, con plazos de ejecución apropiados para evitar el colapso y minimizar el riesgo de quiebra logística.
Como otro de los ámbitos de actuación prioritarios, destacan el prestigio y la imagen del transporte, reiterando el valor simbólico del transporte y la logística para reconocer la importancia de este sector y sus profesionales, con especial atención al conductor para el correcto desempeño de su trabajo.
EN DESTACADO
Jordi Espín
Secretario general de Transprime-Spanish Shippers’ Council
“En el centro de todo, lo que tenemos que colocar es la carga con el conductor al frente”
Nuria Lacaci
Secretaria general de la Asociación de Cargadores de España (ACE)
“Necesitamos un mayor conocimiento de la oferta de servicios ferroviarios y es importante que sea eficaz, rápido y barato”
Carga y descarga
El noveno y último ámbito de actuación preferente recogido en el manifiesto de los cargadores hace referencia a los estándares y muestra su compromiso firme en “abrazar, implantar y defender siempre los estándares existentes, que normalizan la relación entre cargadores y transportistas, la codifican positivamente y mejoran las condiciones de los conductores en los puntos de carga y descarga”, según se especifica en el Manifiesto Charter IRU-ESC & GSA-ITF,
Concretamente, las empresas cargadoras globales, GSA-Global Shippers’ Alliance, juntamente con IRU, la asociación mundial de transportistas por carretera) y el sindicato global de los trabajadores de transporte ITF han creado el citado Manifiesto Charter, que defiende los derechos de los conductores y mejora las condiciones de los conductores para acceder a los puntos de carga y descarga. Esta iniciativa se ha desplegado en España con el lema de “El conductor al frente” y ha incorporado también a los puertos españoles como agentes diseminadores del mensaje.
Otro de los ámbitos en los que están actuando los cargadores es en la llamada “Certificación del cargador responsable” (CCR), que, impulsada desde Transprime Spanish Shippers’ Council y avalada por IRU y European Shippers’ Council), está en sintonía con la normativa de Due Diligence o Diligencia Debida, aprobada por el Consejo de la Unión Europea el pasado mes de mayo, y llamada a cambiar el paradigma de la gestión y contratación logística.
El director general de AECOC, José María Bonmatí, además de subrayar que muchos temas históricos para el sector del transporte por carretera “están ya en el ordenamiento”, pone especialmente en valor el cambio en materia de carga y descarga y la prohibición de su realización por parte del conductor, destacando el “espectacular esfuerzo que se ha hecho para integrar esta actividad en las funciones de las empresas cargadoras”, recordando que hasta ahora el 70% de dichas empresas no realizaba esta actividad.
Código de buenas prácticas
Las empresas cargadoras son generadoras de buenos procesos y son adictas a las buenas prácticas logísticas”, detalla Jordi Espín, secretario general de Transprime Spanish Shippers’ Council. Esta certificación acredita estos “buenos procesos” y su adopción por las empresas cargadoras para el bien de la comunidad logística.
“Esta certificación basada en los principios del Charter IRU ESC del que somos embajadores globales y España es el país piloto marcará nuestros ejes de desarrollo en cuanto a estándares, programas y desarrollo de servicios para los asociados. La logística del bien común es el camino a seguir y será el que nos marcará todos los ejes programáticos que surgirán a partir del CCR en su gadoras españolas y posterior propagación europea”, concluye Espín.
Además, en su intento de avanzar en la mejora de la cadena de suministro sobre la base de prácticas responsables que aumenten los niveles de sostenibilidad, calidad, eficiencia y seguridad, para las empresas y sus trabajadores, así como para el resto de la cadena logística, los cargadores han elaborado un Código de Buenas Prácticas que regula las relaciones mercantiles entre cargadores y operadores logísticos. Tal es el caso del recientemente elaborado y firmado por la Asociación de Cargadores de España y el Clúster Catalonia Logistics.
“Conscientes de la importancia de la cadena de suministro para la economía y la sociedad y que de su correcto funcionamiento dependen multitud de empresas y autónomos, desde ambas entidades hacemos un llamamiento a cargadores y operadores logísticos para que apliquen prácticas sostenibles en su negocio”, dice la presidenta de ACE, Nuria Lacaci.
44 toneladas: “Necesidad ambiental, económica y social”
Teniendo en cuenta que el 95,5% de la exportación hortofrutícola española en 2023 fue enviada en camión, según datos del Departamento de Aduanas e Impuestos Especiales, procesados por la Federación Española de Asociaciones de Productores Exportadores de Frutas y Hortalizas (Fepex), y de que casi el 88% de las toneladas transportadas por el conjunto de las empresas cargadoras, según la encuesta nacional realizada por ACE entre sus empresas asociadas en 2023, utilizaron este mismo medio de transporte, el debate en torno a la implantación de las 44 toneladas adquiere una gran importancia para transportistas y cargadores.
Por ello, los cargadores defienden que la implantación de las 44 toneladas, así como el resto de los compromisos en masas y dimensiones, “permitirá una mayor eficiencia en el transporte de mercancías por carretera y ayudará a mitigar los principales problemas del sector como son la falta de conductores, la descarbonización y la dotación de mayor competitividad a la industria española”.
Desde ACE se han presentado un conjunto de alegaciones, entre las que se incluye la modificación de ciertos aspectos de las fichas técnicas de los vehículos para evitar diferentes interpretaciones cuando la UE permita el transporte transfronterizo de 44 toneladas y duotráileres. “Es algo que va a favor del conductor y va a favor de la carga”, subraya Espín, quien insiste en que las 44 toneladas son “una necesidad ambiental, económica y social”.
“La implantación de las 44 toneladas brinda, a nuestro modo de ver, una oportunidad única de contribuir a la sostenibilidad ambiental con más eficiencia, mayor capacidad y productividad, siendo además una medida que puede ayudar también a mitigar la creciente escasez de conductores profesionales”, sostiene también José María Bonmatí, director general de la Asociación de Fabricantes y Distribuidores (AECOC).