La IA y la sostenibilidad en la Supply Chain fueron los ejes centrales de los Debates ICIL 2024, que contó con la asistencia de más de 150 profesionales de la Supply Chain el miércoles 6 de noviembre a la 20ª edición del evento, celebrado en el DFactory del Consorci de la Zona Franca de Barcelona.
BARCELONA · Un total de 12 destacados profesionales vinculados al ámbito de la Supply Chain, fueron los protagonistas de las distintas ponencias que sirvieron para poner encima de la mesa los problemas y las nuevas tendencias en la gestión de las cadenas de suministro, así como para conocer las mejores prácticas de la mano de empresas líderes del sector.
Carmen Calama, presidenta de la Asociación ICIL, señaló que las 20 ediciones de los Debates han servido “para compartir las buenas prácticas y trabajar desde la colaboración entre profesionales”, dado que uno de los objetivos de ICIL es “divulgar conocimientos, compartir experiencias y poner atención a las nuevas tendencias en la Supply Chain para ir superando retos en materia de innovación y sostenibilidad”.
Por su parte, Xavier Rius, director de ICIL, presentó las distintas iniciativas que está desarrollando la entidad como, por ejemplo, el Supply Chain Innovation Hub, la Supply Chain Talent Network o el Programa de asesoramiento y capacitación en logística del comercio internacional, entre otros.
Las distintas ponencias las protagonizaron expertos de: IBM, SEAT, Mahou San Miguel, Palex, Transcalit, AECOC, DRIBIA, Institut Cerdà, Michael Page, Slimstock, SDG Group y DSV.
Presente y futuro de la aplicación de la IA en la Supply Chain
Javier Arbex, IBM Supply Chain Software EMEA, explicó cómo la IA ya se está aplicando en la gestión de entregas y puso diversos ejemplos de desarrollos y casos de uso que IBM ha implementado como, por ejemplo, un chatbot que asiste al responsable del servicio de atención al cliente y que permite agilizar las gestiones, un asistente/asesor para el comprador online o el AI-assisted Supply Chain operations para centros de distribución, que permite controlar los pedidos, los stocks o las salidas de mercancías, entre otros procesos. En todos estos casos, la IA permite “manejar en tipo real todas las variables y optimizar el cumplimiento de lo que precisa el cliente o el comprador”, destacó Javier Arbex.
También, Enric Martí, director de Logística de SEAT se refirió a la IA como un elemento disruptivo para la Supply Chain porque “da predicciones, recomendaciones y hasta decisiones” pero para que resulte efectiva “las empresas deben tener claro que quieren transformarse”. Destacó cuatro tipos de IA aplicables en entornos industriales y que SEAT ya está utilizando o que tiene en proyecto implementar: la visión artificial, que permite detectar defectos o el guiado de vehículos autónomos; la robótica, con aplicaciones de picking robótico y robots colaborativos que optimizan los procesos; la IA de predicción y optimización, que mejora la planificación de la producción, la gestión del inventario o la predicción de la demanda; o la IA generativa para desarrollar chatbots avanzados, gemelos digitales o análisis documental. Según Enric Martí, en todos estos casos lo que se precisan son “datos sanos para obtener unos resultados óptimos” en ámbitos en los que SEAT utiliza la IA para la predicción y análisis avanzado de la demanda, la automatización de procesos y toma de decisiones autónoma, la sostenibilidad y optimización de recursos o la gestión de riesgos.
Por su parte, Oleguer Sagarra, Co-CEO en DRIBIA, habló de la aplicación de la IA en la logística, concretando, con casos prácticos, los aspectos claves que un manager debe tener en cuenta a la hora de identificar las tareas que tiene de hacer la IA, dado que la IA “es la capacidad de un ordenador de procesar datos y encontrar patrones y alcanzar con éxito y rapidez una tarea muy concreta”. En este sentido, la compañía ha desarrollado aplicaciones muy concretas de IA en empresas que han permitido, por ejemplo, predecir las ventas B2B2C o predecir y mitigar las devoluciones de las ventas e-commerce. Oleguer Segarra quiso destacar que las predicciones con IA “no son sustitutivas sino un complemento”.
Otro experto que aportó su visión sobre la adopción de la IA en la Supply Chain fue Enric Escalé, Senior Executive en SDG Group, mencionado especialmente los beneficios que aporta la IA generativa y los casos de uso en empresas que la utilizan “para mejorar procesos y ser más eficientes” en ámbitos como la previsión de la demanda, la optimización del inventario o el mantenimiento predictivo. La IA generativa presenta nuevas oportunidades porque permite aprovechar fuentes de información desestructurada, como texto e imágenes, para enriquecer los análisis y la toma de decisiones. Asimismo, facilita la interacción a través de chatbots u otros sistemas, ofreciendo una alternativa más intuitiva y dinámica que los dashboards tradicionales. Pero antes de iniciarse con la IA generativa conviene, en primer lugar, “identificar los problemas que tienen los empleados en el desarrollo de sus tareas” para, seguidamente, “empezar con proyectos escalables” y determinar el enfoque tecnológico más conveniente.
Otras tecnologías para la sostenibilidad de la cadena logística
Para hablar de las tecnologías que ayudan a incrementar la sostenibilidad en la cadena de suministro, Andreu Cerdà, responsable de Procesos Logísticos en AECOC, se refirió a un estudio que ha realizado la entidad para analizar las tendencias tecnológicas en logística en el corto plazo (de 0 a 5 años), y el medio plazo (de 5 a 10 años). En el corto plazo, destacan la robótica estacionaria (robots que realizan una tarea desde una ubicación fija), el Big Data Analytics (análisis de datos para revelar patrones del pasado y crear predicción), la visión por ordenador (usar imágenes de cámaras a las que aplicar IA), Smart printable (etiquetas con tecnología inteligente), packaging de nueva generación (con tecnología añadida), Edge Computing (computación de proximidad), o la IA generativa. En el apartado de 5 a 10 años, destacó las energías alternativas para el transporte, los vehículos autónomos, los drones, los sensores portátiles, los gemelos digitales, la blockchain, la omnicanalidad, o los marketplaces digitales (plataformas que hacen coincidir demanda de productos y servicios con la oferta disponible). Andreu Cerdà indicó que “estas tecnologías disruptivas son las que generan un cambio de paradigma”, añadiendo que la IA “nos puede ayudar a desarrollar talento y a hacer más eficiente toda la cadena de suministro”, sin olvidar que “no es necesario implantar todas estas tecnologías que están a disposición de las empresas” porque “es la tecnología la que debe estar al servicio de la empresa y las personas, no al revés”.
Por su parte, Manuel Yagüe, Business Manager en Slimstock, explicó cómo la gestión de inventarios puede ser una palanca hacia la sostenibilidad, partiendo de la base de que las empresas “tienen un deber ético de operar de manera responsable, minimizando su huella ambiental”. Por esta razón, las organizaciones deben estar en condiciones de afrontar, a través de la tecnología, una serie de retos ambientales, económicos y sociales. Respecto a la reducción de la huella de carbono, “la optimización de rutas y una gestión eficiente de inventarios y stocks, con la implementación de sistemas de predicción de la demanda basados en IA, son los principales elementos a tener en cuenta”. Otras medidas pueden ser implementar energías renovables y mejorar la eficiencia energética de las instalaciones y de los vehículos de transporte. En el ámbito de los retos económicos, la gestión de inventarios es clave, dado que las empresas pueden platearse una “eficiencia en el uso de sus recursos”, evitando caducidades de productos, previendo la obsolescencia o gestionado los ciclos de vida de las compras. Todo ello, aplicando la innovación y la tecnología sostenible en la planificación, como el machine learnig o la IA.
Por otro lado, Carmen Calama, directora de Proyectos Transversales en Mahou San Miguel, explicó un caso de éxito de la empresa relacionado con la optimización del portafolio de productos como elemento clave para potenciar la resiliencia y el desarrollo de negocio. Señaló que la compañía se planteó la necesidad de cuantificar el impacto económico de la complejidad de su portfolio para lo cual definieron, diseñaron e implementaron herramientas digitales y analíticas que permitieron una gestión integral de sus productos, determinando “un ciclo de vida de cada producto”. Para ello, la compañía trabajó en el “gobierno del dato para tomar decisiones apoyadas en estos”, precisó Carmen Calama.
Descarbonización de la actividad logística y el transporte
Para hablar sobre las posibilidades actuales que las empresas de transporte y logística tienen a su alcance, económico y tecnológico, para descarbonizar su actividad, intervinieron Jesús Lozano, presidente de Transcalit, y Alexander Cortecero, Logistics Manager en Palex.
El presidente de Transcalit matizó que las empresas del sector logístico “están dispuestas a invertir, cada una dentro de sus posibilidades, en materia de digitalización, sostenibilidad y gestión del talento”, pero la realidad pone de manifiesto que “hacen falta importantes inversiones en innovación tecnológica que son superiores a la capacidad inversora real de la gran mayoría de medianas y pequeñas empresas”. Incidió en que “no hay opciones claras para electrificar las flotas de camiones” y, económicamente, “no podemos asumirla”. Añadió que, en sostenibilidad, “no parece que las empresas usuarias del transporte estén dispuestas a pagar más por un servicio más ecológico”. Y, respecto a la gestión del talento, sentenció que “ni lo tenemos ni lo atraemos” y la prueba está en que la demanda de profesionales de todo tipo, aunque especialmente de conductores, supera a la oferta existente y, además, no para de crecer. También hizo hincapié en la necesidad de que, cuando hablamos de sostenibilidad, es imprescindible que “tengamos datos reales, contrastados y veraces”. Para Jesús Lozano, “el sector del transporte por carretera está a punto de colapsar” porque aquella empresa o agencia que no aporte en “rapidez, precio y personalización de servicio, desaparecerá”.
Por su parte, Alexander Cortecero explicó cómo en Palex han desarrollado un innovador sistema de packaging para productos hospitalarios que permite cumplir con las exigencias logísticas de la cadena de frío. Las unidades de embalaje y transporte de Palex aseguran la temperatura en diferentes rangos (de 2º a 8º C, de -20º a -80º C) y todas ellas son recicladas, reciclables y sostenibles, dado que utilizan cartón y 0 plástico. Otra de las cajas diseñadas por Palex está equipada con el sistema “orca Coolchain” que conserva el producto en las condiciones de temperatura adecuadas y necesarias hasta 120 horas. Asimismo, toda esta tipología packaging está optimizada al máximo y, al tener un volumen más reducido, se necesitan menos vehículos para transportar los productos, generándose un importante ahorro de espacio y dinero y un consecuente aumento en descarbonización.
Jéssica Civil, gerente del área de movilidad sostenible del Institut Cerdà, se refirió a las alternativas para el sector del transporte pesado de mercancías por carretera en el escenario de la neutralidad climática prevista para el 2050. La entidad ha llevado a cabo un estudio que evalúa las diferentes alternativas tecnológicas de descarbonización y que presenta dos escenarios distintos para el corto plazo (año 2030) y para el largo plazo (2050).
Para el escenario 2030, se considera que se utilizarán, de mayor a menor orden de priorización, las tecnologías del diésel (HVO), el gas (biometano), los combustibles sintéticos (e-fuels), el motor eléctrico (pila de hidrógeno), y el gas (GNV). En este escenario, no se contempla la alternativa del hidrógeno, dado su estado de poca madurez tecnológica, ni el biodiésel, ya que queda reemplazado por el HVO. En la categoría eléctrica, se descarta el 100% eléctrico debido a las limitaciones en términos de autonomía y velocidad de carga.
Para el horizonte 2050, el orden de priorización de las distintas tecnologías es, de mayor a menor, el motor eléctrico, el eléctrico de pila de hidrógeno, el hidrógeno, el diésel (HVO), los combustibles sintéticos (e-fuels) y el gas (biometano). En este escenario, se considera que la tecnología de hidrógeno estará lo suficiente madura para tener vehículos en el mercado; el eléctrico habrá superado las barreras actuales en autonomía y tiempo de repostaje. La alternativa del GNV ya no se tendrá en cuenta por su origen no renovable y por sus emisiones.
Finalmente, también Sergi Hernández, Manager QSHE en DSV, explicó la estrategia de descarbonización y la hoja de ruta hacia una logística más sostenible de esta compañía, y puso en relieve que las organizaciones y empresas tienen que “dar importancia a la gestión de los riesgos ambientales, sociales y de gobernanza” porque van surgiendo nuevas normativas y leyes en estos ámbitos que “ya tenemos que empezar a cumplir”. A modo de ejemplo, y en lo que concierne al transporte y a la logística, citó las nuevas reglamentaciones europeas, algunas en vigor y otras que se implementarán antes del 2030, y que afectan al transporte marítimo, aéreo y por carretera, como, por ejemplo, el ETS1 y ETS2 (European EmissionsTrading System), el CBAM (Carbon Adjustment Mechanism) o Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono, la REDIII (Renewable Energy Directive), ReFuel Aviation, CORSIA (Carbon Offsetting and Reduction Scheme) o Plan de Compensación y reducción de Carbono para la Aviación Internacional, la Euroviñeta, el FuelUE Maritime, las reglamentaciones de la Organización Marítima Internacional (IMO) o el CSRD (Corporate Sustainability Reporting).
En busca del talento logístico y reducir las brechas
Otro aspecto importante para el sector de la logística es la gestión, retención y búsqueda de talento, así como reducir la brecha en las expectativas profesionales. Para hablar de ello, intervino Alfonso Caracuel, director de Michael Page, que dio unas pinceladas sobre el “Talent Trends 2024” que ha realizado la compañía. En este estudio, los profesionales dan su opinión sobre los salarios, la cultura corporativa y otros aspectos que vienen a confirmar que las empresas se están enfrentando a una brecha de expectativas. En este sentido, las principales conclusiones que se extraen del estudio es que “el salario, la autonomía y flexibilidad y el fomento de la inclusión son las principales expectativas a las que se enfrentan las empresas” y que deben incorporar políticas en estos ámbitos en sus organizaciones para retener el talento.
Es así como el 62% de las empresas considera que ofrecer un salario competitivo es importante para fidelizar el talento y el 58% considera que ofrecer un salario más alto que el del puesto actual de un trabajador resulta clave para contratar talento. Por la parte del personal, en España, un 53% prioriza el salario cuando acepta o se presenta a un nuevo puesto de trabajo y un 50% sigue sin estar satisfecho con su salario y busca nuevas oportunidades por este motivo.
En cuanto a la brecha en la flexibilidad, un 56% de los encuestados consideran que el equilibrio entre la vida profesional y la personal es el aspecto de la cultura empresarial que más influye en su satisfacción y un 57% renunciaría a un ascenso si el nuevo puesto implica sacrificar este equilibrio.
Finalmente, por lo que respecta a la búsqueda e incorporación de talento joven, Alfonso Caracuel alertó que los currículums que reciben las empresas “son en su mayoría de personas mayores de 35 años”. Por esta razón, “debemos plantearnos por qué los jóvenes no tienen interés por incorporarse al mercado laboral y por qué tampoco quieren trabajar en nuestras empresas”.