La realidad y el día a día de las bases de contenedores ha experimentado un giro de 180 grados en el último año. La falta de espacio por los altos picos de carga ha dejado paso a un descenso en la actividad provocado por la contracción del comercio internacional. La adaptación a un mercado cambiante, las sinergias con otros modos de transporte y su relación con la Administración -tanto portuaria como general- son los grandes retos a los que se enfrenta el sector.
valencia. Diario del Puerto PLUS entrevista a Juan José Pérez y Tomás Pellisé, presidente y vicepresidente de la Asociación Española de Depósitos Reparadores de Contenedores (ARCE), respectivamente, para analizar en qué momento se encuentran las bases de contenedores y su relación con el resto de la cadena logística.
¿Cuáles son los principales retos de las bases de contenedores en la actualidad?
Creo que el más importante es el de la flexibilidad, poder adaptarnos a un mercado cambiante. Hace un año las navieras, con fletes espectaculares, nos apremiaban a la hora de prestar nuestros servicios. Ahora estamos en la situación contraria, teniendo el mismo equipo y las mismas grúas. Tampoco hay que olvidar el enorme cambio tecnológico que se está produciendo, un cambio al que debemos adaptarnos. Ya hay navieras que utilizan la Inteligencia Artificial para anticiparse incluso a los movimientos estimados que les facilitamos. Estamos en un entorno muy cambiante, por lo que la flexibilidad y la adaptación a la evolución tecnológica del sector es fundamental.
“Estamos en un entorno muy cambiante, por lo que la flexibilidad y la adaptación a la evolución tecnológica del sector es fundamental”
¿Cuál es el papel que deben desempeñar las bases de contenedores en la competitividad de la cadena logística?
Nuestro rol sigue siendo el mismo. Somos los responsables del equipo que se necesita para que las mercancías viajen por el mundo y facilitamos y permitimos la exportación. Los depots trabajamos con la Certificación ACEP (Aproval Continuous Examination Program) para definir la entrada regular de un contenedor de un depot. El hecho de poder reparar y acondicionar el equipo para futuras exportaciones nos ayuda a favorecer el comercio internacional. Nuestro mercado no es local, ni nuestra competencia tampoco. Es cierto que tenemos un mercado local en nuestros puertos, pero si las reparaciones e inspecciones que realizamos no son competitivas, corremos el riesgo de que esta demanda de servicios se traslade a otros mercados donde la mano de obra es más barata y la legislación es más laxa.
¿Podría haber comercio internacional sin depots?
Alguien tendría que hacer nuestro trabajo, ya fuera con otro nombre o se llamara de otra manera. Es verdad que las terminales, que son en parte nuestra competencia, almacenan equipo vacío o reparan reefers, pero no llevan a cabo una labor específica y fundamental, que es la inspección de contenedores.
“Si las reparaciones e inspecciones que realizamos no son competitivas, corremos el riesgo de que esta demanda de servicios se traslade a otros mercados”
¿Qué retos tienen las bases de contenedores desde el punto de vista del transporte por carretera?
Lo primero que hay que hacer es constatar que esas denuncias que realizan en ocasiones los transportistas son ciertas. No obstante, debemos ayudar a que los camiones se estén moviendo, que es lo que tienen que hacer. Hay que puntualizar, a pesar de todo, que las empresas de transporte son usuarios, pero no clientes, por lo que no pagan por el servicio. Las bases de contenedores han realizado importantes inversiones en optimizar y automatizar los accesos. Nos encontramos en una situación de búsqueda de constante equilibrio, pero hay que recordar siempre que las navieras son nuestros clientes.
“Las terminales no llevan a cabo una labor específica y fundamental, que es la inspección de contenedores”
¿Qué sinergias son posibles desde el punto de vista del ferrocarril?
Donde haya un puerto seco, debe haber un depot. Hay bases de contenedores que han pedido contar con infraestructuras ferroviarias, que por otro lado son instalaciones carísimas, y que debería instalarse en una superficie donde ya hay actividad. A medida que los buques y terminales crecen, los depots deberían contar con infraestructuras ferroviarias, sobre todo las bases que se construyan en un futuro. Por ejemplo, en el Puerto de Róterdam no se hace un planeamiento de nuevas terminales ni depósitos sin ferrocarril. Si tienes picos de trabajo de 8.000 TEUs, debes tener un depot cerca.
¿Cómo se consideran las bases de contenedores tratadas por el resto de los eslabones de la cadena logística y el sector en general?
Uno siempre pueda estar mejor tratado. La relación con el resto de la cadena logística es un continuo tira y afloja. No olvidemos que el depot gestiona equipo vacío, pero donde realmente está el valor y el negocio es en el lleno. Al final, el depot supone un coste, y el coste está mal visto, aunque seguimos siendo un mal necesario.
Una de las grandes reivindicaciones de las bases de contenedores ha sido la de estar incluidos en los planes directores de los puertos. ¿Hay reciprocidad por parte de Puertos del Estado para tener en cuenta esta petición? ¿Qué acciones está llevando a cabo ARCE para lograr este objetivo?
Hemos de reconocer que por parte de Puertos del Estado hay una escucha activa, aunque luego cada Autoridad Portuaria gestiona sus puertos de manera diferente. Desde ARCE intentamos tener presencia en los puertos donde contamos con empresas asociadas. Hemos comenzado a intensificar los contactos con diferentes puertos, empezando por Bilbao. Queremos extender esas reuniones a otros enclaves.
“A medida que los buques y terminales crecen, los depots deberían contar con infraestructuras ferroviarias, sobre todo las bases que se construyan en un futuro”
¿Cree que esta estrategia fructificará en un futuro?
Tenemos esperanza, aunque sabemos que es complicado, debido en parte a que ahora son pocos puertos los que están acometiendo ampliaciones y la puesta en marcha de nuevas terminales. No obstante, poco a poco se es más consciente de la necesidad de los depots. Parece algo evidente, pero en ocasiones hay que hacer ver nuestro valor.
“La solución a la falta de perfiles profesionales pasa por fomentar y reforzar la Formación Dual para poder realizar prácticas en las empresas”
Los puertos conocen su actividad, pero ¿y el resto de las administraciones? ¿Son conscientes del rol de las bases de contenedores en la cadena logística?
La relación que tenemos con las administraciones generales son la que pueda tener cualquier industria, no hay una relación especial. Sí es cierto que, cuando entramos a analizar casuísticas muy concretas, hemos de realizar una labor pedagógica muy importante y más en un sector de actividad con muy pocas empresas activas en toda España. Por ejemplo, en el tratamiento de gases fluorados, hemos tenido que explicar que no somos instaladores de aire acondicionado. Somos, en suma, un sector tan específico que en ocasiones no nos entienden. Y tampoco podemos olvidar que en ocasiones encontramos tremendas ineficiencias entre esas administraciones.
“Somos un sector tan específico que en ocasiones las Administraciones Públicas no nos entienden”
A juicio de los depots, ¿cómo debe afrontarse un problema como la falta de profesionales especializados?
Es un problema que sufrimos intensamente. Para nosotros, la solución pasa por fomentar y reforzar la Formación Dual, para realizar prácticas en las empresas, ya que en estos momentos no hay un proceso de formación específica y somos las bases las que tenemos que afrontar estos procesos formativos. Además, tenemos un hándicap en contra, y es que es un trabajo duro, pesado y físicamente tiene su impacto.
Objetivo: otorgar visibilidad a la asociación
Hace algo más de un año que Juan José Pérez ocupa la presidencia de la Asociación Española de Depósitos Reparadores de Contenedores (ARCE), tras sustituir en el cargo a Juan Ureta. El balance que realizan tanto Juan José Pérez como Tomás Pellisé es “muy positivo”, sobre todo en el aumento de socios que se ha constatado en los últimos meses. Desde ARCE “seguimos potenciando nuestra función, que es el de dar visibilidad a la organización y a sus asociados fuera de lo que hasta ahora había sido su entorno más cómodo, que es el del Puerto de Valencia”. En ese sentido, ya se han producido encuentros con diferentes autoridades portuarias, como la de Bilbao, una estrategia que se pretende extender a otros enclaves españoles donde ARCE cuenta con empresas asociadas.