berlín. En concreto, el sector demanda acciones de reducción de la burocracia, el control de la competencia desleal de terceros países, la reciprocidad, la simplificación de ecorregímenes de condicionalidad reforzada de la Política Agraria Común (PAC), la imposición del cuaderno digital, el asesoramiento en normativas en fertilización o la gestión integrada de plagas, entre otras.
Carlos Mazón cree que “no puede ser que se siga tratando mejor a los de fuera que a los que trabajan aquí todos los días cumpliendo todo o incluso más” por lo que el Consell va a exigir al Gobierno central que “tengamos por fin una defensa ante las instituciones europeas”.
En esta línea, la Conselleria de Agricultura, Ganadería y Pesca, ha instado al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación a solicitar a la Comisión Europea la movilización de fondos de la reserva de crisis de la PAC, correspondientes al ejercicio financiero 2024.
Este fondo facilitará a agricultores y ganaderos a aliviar la crisis de producción y de precios como consecuencia de la pertinaz sequía y también de los efectos de los actuales conflictos bélicos. Además, desde la Generalitat se ha pedido al Gobierno central que se incluya a la viña y el olivar en estas ayudas, “los grandes olvidados de los años anteriores”.
Desde el Consell se ha reclamado al Ministerio de Agricultura y a la Comisión Europea la puesta en marcha de medidas inmediatas que permitan una simplificación efectiva de la burocracia a la que se ven sometidos los titulares de explotación para poder percibir las ayudas de la PAC. Asimismo, la Generalitat también ha instado a la mejora de las estructuras agrarias para incrementar la rentabilidad, el impulso del producto de proximidad frente a las importaciones, las exigencias de reciprocidad en los acuerdos comerciales o en la adaptación de la normativa a la agricultura y ganadería mediterránea.