Enric Ticó · Presidente de FETEIA-OLTRA
Nos preocupa la inestabilidad geopolítica y la dificultad de poder detectar disrupciones futuras
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El comercio internacional está encadenando diferentes conflictos que dificultan la labor de los transitarios. En este contexto de incertidumbre, el presidente de FETEIA-OLTRA, Enric Ticó, habla a Diario del Puerto Publicaciones sobre cómo afecta al sector esta situación, los pasos en sostenibilidad que se están dando y la relación de la Federación con la administración pública.
¿Cómo ve el sector de los transitarios a nivel general?
Lo veo bien, la verdad. Creo que tenemos grandes profesionales en el sector que están capacitados para sacar adelante todos los retos a los que se enfrentan. Dicho esto, es verdad que nos preocupa la gran inestabilidad geopolítica a nivel mundial.
Antes todo era más previsible y ahora es imprescindible planificar una alternativa a cualquier transporte de mercancías porque puedes encontrarte con cambios en mitad del trayecto.
El año pasado, con motivo del lanzamiento del especial Transitarios, estuvimos hablando de la guerra de Rusia y Ucrania. Doce meses después tenemos el conflicto bélico en Gaza y sus consecuencias en el Mar Rojo...
Ahora la guerra de Ucrania ya no es un problema porque hemos encontrado soluciones para evitarlo, pero el conflicto de Israel y Palestina tiene consecuencias todavía más importantes para el comercio internacional.
Estamos en un mundo inestable y no parece que se solucione a corto plazo. Y creo que ahora es el momento para el sector asociativo para ayudar a nuestras empresas a dotarse de la máxima capacidad de funcionamiento, trabajo en equipo, formarse, ampliar las redes de contactos, etc. Lo que se repite muchas veces de que ante una crisis deben surgir oportunidades.
FETEIA debe ser una herramienta para dar soporte e información a nuestros asociados y también para demostrar un valor añadido.
“Nos preocupa la repercusión que esta crisis del Mar Rojo pueda tener en las infraestructuras y la tensión que se genera crea cansancio en los trabajadores”
¿Cómo se está gestionando con los clientes la congestión que sufren los puertos españoles del Mediterráneo a raíz de la crisis del Mar Rojo?
Forma parte de la gestión del sistema. Es obvio que esta situación nos complica nuestra tarea, pero los transitarios estamos preparados para buscar soluciones alternativas. Forma parte de nuestro trabajo y también esto hace imprescindible el trabajo del transitario, esta visión general del mundo que permite adaptar el transporte de las mercancías.
¿Hay algo más que le preocupe?
Nos preocupa la repercusión que esta crisis del Mar Rojo pueda tener en las infraestructuras, la tensión que se genera crea cansancio en los trabajadores, crea ineficiencias y dudas, decrece la confianza en los puertos... Para mí el tema principal es la inestabilidad absoluta y la dificultad de poder detectar disrupciones futuras.
El presidente de ATEIA-OLTRA Barcelona, Emilio Sanz, escribió una carta pidiendo a las navieras que cedan a los transitarios la gestión del transporte por carretera. ¿Respaldan esta demanda desde FETEIA?
Estamos totalmente de acuerdo con Emilio Sanz, por supuesto; de hecho, es lo que hemos defendido siempre en reuniones con las principales navieras. La demanda no se enfoca tanto a “dejadnos hacer negocio”, sino a “dejad realizar el trabajo a los que saben”. Las navieras ya tienen suficiente trabajo en transportar las mercancías por mar de un puerto a otro y el sistema siempre había funcionado cuando nos dejaban la parte terrestre a los transitarios.
“El sistema siempre había funcionado cuando las navieras nos dejaban la parte terrestre a los transitarios”
En abril expiró el Consortia Block Examption. ¿Qué valoración hace de los primeros meses sin esta normativa?
En primer lugar, nosotros vivimos con mucha satisfacción que esta batalla que parecía muy complicada se ganara. Dicho esto, la colaboración es normal en cualquier sector y nosotros también la fomentamos en el conjunto de nuestras empresas, pero con límites. Es lógico que las navieras busquen mejores rendimientos y, en algunos casos, se entiende que exista esta colaboración para que no haya dos servicios exactamente iguales en una misma zona.
Desde nuestra modestia, nosotros seguiremos vigilando que esta colaboración no acabe significando la desaparición de la competencia en el sector naviero, que no solo sería perjudicial para el transitario, sino también por el consumidor final.
La reforma del nuevo Código Aduanero de la Unión está prevista que se empiece a aplicar en 2028 pero todavía hay muchos detalles por conocer. ¿Cree que se llegará a tiempo?
Todavía hay mucha indefinición, pero al mismo tiempo también hay mucha participación de todos los actores implicados. En este sentido, no nos podemos quejar. Nosotros no pedimos que se prolongue el período de aplicación, sino que se trabajen ahora los temas en profundidad para no encontrarnos con problemas más adelante. Creemos que el proceso de reforma se está realizando correctamente.
Por otro lado, ¿cómo ve la implementación de la inteligencia artificial para mejorar los procesos de las empresas logísticas?
Se está avanzando mucho y creo que será muy importante para el sector, en concreto, para predecir picos de demanda que permitan mejorar la gestión de los procesos. Creo que se ha puesto el foco en los efectos negativos de la inteligencia artificial y no se habla suficiente de las grandes ventajas que va a comportar.
Estamos en el momento inicial de una nueva tecnología y muchas veces pasa que crea rechazo, pero ahora es momento de seguir desarrollándola y que la Unión Europea regule sobre el tema para dar garantías.
Y qué opina de los certificados que estandarizan la calidad de servicio, ¿son necesaios? ¿Impulsan la competitividad?
Para mí el tema principal es definir FETEIA como certificado de calidad. Creemos que hoy en día las empresas invierten continuamente en nuevas certificaciones que comportan más trabajo y más costes.
Desde FETEIA, que debatimos la necesidad de crear un sello de calidad propio, al final llegamos a la conclusión de que formar parte de FETEIA ya quiere decir que la empresa cumple con unos requisitos mínimos. No todas las empresas pueden entrar en la asociación, antes deben pasar unos controles.
“Estoy muy agradecido a FETEIA y no voy a dejar el cargo de un día para otro sin avisar”
¿En qué momento se encuentra FETEIA?
En los últimos tiempos está cambiando todo muy rápido. Cuando se creó la asociación fue un ejemplo de visión estratégica, de un grupo de agentes de aduanas que modernizaron sus procesos y creo que ahora estamos delante de una segunda etapa de replantearse otro salto adelante, preguntarse dónde está el negocio, cómo podemos dar mejor servicio a nuestros asociados, cómo podemos combatir a la gente que ejerce nuestra profesión sin cumplir con los deberes y sin tener la capacitación necesaria, etc.
¿Debe aumentar la colaboración con otras asociaciones del sector?
Todos formamos parte del mismo negocio. Por ejemplo, no me serviría si a los transitarios nos va muy bien y a las navieras muy mal. Deseo que todas las empresas del sector puedan salir adelante.
Creo que sería bueno que los que estamos al frente de las asociaciones empresariales hablemos más entre nosotros y que tengamos más empatía con la realidad de las otras asociaciones del sector.
Hace menos de un año que Nerea Rodríguez entró como nueva directora de Aduanas e Impuestos Especiales. ¿Ha tenido oportunidad de reunirse con ella?
Antes de nada, quiero constatar que la anterior directora, Pilar Jurado, fue una persona muy abierta con nuestros planteamientos y con quien tuvimos una gran relación. La nueva directora, que llega al cargo acumulando una gran experiencia en el ámbito aduanero, creo que comprende perfectamente nuestras necesidades. Nosotros insistimos en la necesidad de que haya un responsable único de cada punto de inspección y, en los últimos tiempos, han empezado a moverse cosas que nos permiten ser optimistas en cuanto a nuestras reivindicaciones.
¿Cómo definiría la relación de FETEIA con las instituciones públicas?
Ya son 20 años como presidente de FETEIA y, a veces, tengo la sensación de dejà-vu con algunos temas. Los interlocutores cambian cada dos por tres y esto significa que tenemos que volver a empezar el proceso para convencerlo de cambios que son necesarios realizar.
A veces pienso que me interesa más el debate desinteresado sobre el sector que el tener que perseguir por intereses legítimos a los representantes del sector público que, muchas veces, nos ven como unos interesados.
Ya son 20 años como presidente de FETEIA y, a veces, empiezo a pensar que ya no sirvo para esta tarea de perseguir con nuestras demandas legítimas, repito, a los representantes públicos.
¿Entiendo que podría estar planteándose dejar la Presidencia de FETEIA?
Yo estoy aquí para servir a una organización que me ha dado muchísimo y a la cuál estoy muy agradecido, así que lo que seguro que no voy a hacer será dejar el cargo de un día para otro sin avisar.
En los últimos años hemos apostado por un rejuvenecimiento de la asociación, hay gente muy potente dentro de la organización.
“La conexión ferroviaria entre Asia y Europa es el gran reto logístico a nivel mundial”
Uno de los retos principales del sector logístico es avanzar en términos de sostenibilidad y para ello se están poniendo grandes esfuerzos en el desarrollo del ferrocarril. ¿Qué opinión tiene al respecto?
No se entiende que a estas alturas no haya cinco o seis corredores ferroviarios entre Asia y Europa. Hay uno, que parece que está funcionando bien, pero debería haber más. A veces me pregunto si el tema de la sostenibilidad lo usamos solo de palabra y no pasamos a los hechos. Para revertir las emisiones los gobiernos deberían invertir en nuevas infraestructuras y, a partir de aquí, desarrollar un modelo que favorezca la libre competencia entre todos los actores. Creo que la conexión ferroviaria entre Asia y Europa es el gran reto a nivel logístico mundial.
¿Y el desarrollo del ferrocarril a nivel nacional?
En la última legislatura se está notando un claro impulso en cuanto a infraestructuras, que seguro que se notará en los porcentajes de tráfico en un futuro. Uno de los motivos para celebrar el Congreso FETEIA en Zaragoza es precisamente conocer de primera mano las diferentes infraestructuras ferroviarias que se han desarrollado en Aragón.
Por otro lado, creo que tenemos un problema para resolver, que es la capacidad operativa de Renfe. Creo que, poco a poco, se han ido desvinculando del ámbito logístico y lo lógico sería dejar entrar sin ninguna restricción la competencia del resto de operadores ferroviarios y que opere quien tenga mejores posibilidades de hacerlo.
Los avances en materia de sostenibilidad en los puertos, ¿qué le parecen?
Creo que los puertos de Barcelona y Valencia, por poner dos ejemplos, están haciendo un gran trabajo en este sentido, desarrollando sistemas de electrificación de muelles y conexiones ferroportuarias.