MADRID. “He tenido el privilegio de formar parte de una gran empresa, Bergé, y de impulsar un proyecto tan retador como emocionante durante cuatro años y medio”, ha afirmado el mismo García Navarro.
”Esta fase llega a su fin, de mutuo acuerdo”, añade. Pedro García Navarro ha hecho un balance de su tiempo en Bergé: “sin caer en vanidad ni falsa modestia, considero que la empresa está hoy en mejor situación que en marzo de 2020, cuando me uní al equipo”.
Asimismo, ha indicado que este progreso “ha sido fruto del esfuerzo colectivo de muchos profesionales, pero siento orgullo personal al haber contribuido a la mejora de los resultados económicos, la modernización organizativa y la orientación al cliente, así como al avance en digitalización y la renovación de activos a través de un ambicioso plan de inversiones”.
Pedro García Navarro ha agradecido a sus compañeros de Bergé, al CEO de la compañía, Juan Aguirre, al presidente de Bergé, Jaime Gorbeña y al consejo de administración de la compañía.