Con el objetivo de formar adecuadamente a los futuros profesionales del sector logístico portuario es fundamental el diálogo entre los centros educativos y las empresas. Este binomio impulsa las capacidades del alumnado al tiempo que da respuesta a las necesidades de nuevo talento del sector.
Un ejemplo de esta colaboración armoniosa se ha establecido recientemente entre nuestro centro de Formación Profesional (INS Les Salines) y la Asociación de Consignatarios de Barcelona. Gracias al diálogo abierto entre ambas entidades se han podido detectar algunas de las necesidades del sector marítimo barcelonés y se han intentado establecer herramientas pedagógicas para formar a los futuros profesionales que tanto demanda el sector logístico, especialmente vinculado a empresas de sector marítimo y especialmente a la consignación de buques.
Gracias a esta escucha activa se pueden poner en funcionamiento programas de formación dirigidos al alumnado de los ciclos formativos de grado superior de “Transporte y Logística” y de “Comercio internacional” más reales, más cercanos a la cadena logística y al día a día de las empresas.
En este sentido, gracias a estar en contactos con las instituciones y empresas se pueden aportar conocimientos adicionales sobre transporte marítimo, en este caso, a los futuros técnicos superiores de ambas titulaciones de FP para, con ello, dar respuesta a la formación de talento mayoritariamente joven vinculado al colectivo de las empresas consignatarias.
Además, los estudiantes conocen de primera mano conceptos claves para el sector naviero o de la agencia marítima (línea regular, ro-ro, tramp, flete, intermodalidad, procesos documentales, carga, estiba, transporte marítimo de corta distancia, operaciones portuarias, gestión comercial y financiera, etc.) que formarán parte de su día a día una vez se incorporen al mercado laboral.
Sin duda, con iniciativas como esta, los centros formadores damos un salto significativo hacia el acercamiento de la profesión a los y las estudiantes de formación profesional, cualificándoles profesionalmente en aquello que más les puede aportar: la formación especializada, actualizada y veraz que solo el propio sector logístico portuario puede aportar.
Si, además, la formación puede llegar a nuestros estudiantes a través de las voces del sector, la calidad se incrementa notablemente. Nosotros hemos sido testigos de que esto es así porque hemos podido contar con 19 profesoras y profesores de la Asociación de Consignatarios de Barcelona como formadores expertos en tres cursos (Transporte Marítimo de Línea Regular, Transporte Marítimo de Carga Rodada y Agencia Marítima Tramp). Durante las sesiones han pasado por nuestras aulas y hemos tenido la oportunidad de conocer personalmente (tanto los docentes de nuestro centro educativo como nuestro alumnado) a personas como Leandro Calzadilla, Jaime Paz, Gregorio Chiner, Ignacio Amaro, Salvador Richart, Albert Pallarés, Albert Oñate, Eulalia Arana, Jordi Trius, Beatriz Pérez, David Soro, Iñaki Echeverria, Cristóbal Ruiz, Arturo Fernández, Joan Ferrer, Juan Antonio Villa, Iván Ausina, Laura Ferrario e Isaac Sabaté.
En conclusión, la profesionalización y la formación son elementos clave, es más, son la principal vía para garantizar el futuro de la cadena logística, así que podemos y debemos estar cerca de las empresas, conocer sus necesidades e ir adecuando la formación que impartimos a los nuevos desafíos que la propia actividad logística presenta.
Sin escucha activa, sin diálogo con los agentes y actores logísticos, la formación no estará completa ni se acercará a responder las exigencias de un sector productivo que busca y necesita incorporar nuevo talento.
Pero enlazando que lo anteriormente expuesto, solo queda un paso más, las prácticas formativas en las empresas. Cerraremos el círculo formativo si disponemos de empresas que apuesten por incorporar a los estudiantes y puedan realizar sus prácticas formativas, porque será con estas prácticas que adquirirán realmente la capacitación que necesitan. Todo el mundo sabe que “el oficio se aprende en el lugar de trabajo”, nosotros (los centros educativos) desarrollamos una parte de la capacitación que necesita el sector logístico, pero es en las empresas donde se ponen de manifiesto los conocimientos adquiridos, se aprenden nuevos y se capacita realmente para una posible incorporación ulterior al mercado laboral.
Y si hablamos de prácticas formativas, debemos hablar de prácticas formativas en modalidad dual. Esta modalidad de prácticas formativas supone el mejor método para capacitar y formar estudiantes y por tanto la mejor manera de formar y captar talento por parte de las empresas.
Así pues, si apostamos por una formación que incluya programas especializados y las empresas también apuestan por incorporar al alumnado en la modalidad de prácticas formativas dual, la formación, capacitación e incorporación del talento está garantizada.