Así lo ha confirmado el responsable de sistemas del grupo Sesé, Manel Solás, después del éxito de la prueba piloto, que ha permitido transportar un volante y un airbag desde el centro logístico de Sesé en Abrera hasta la fábrica de SEAT en Martorell, cubriendo una distancia de poco más de 2 kilómetros.
El responsable de sistemas de Sesé asegura que se trata de un proyecto “en el que hemos tenido que analizar muchos aspectos, así como la normativa que regula el vuelo de drones, la elección de las piezas que queríamos transportar o el diseño del recorrido”. Además, Solás asegura que desde Sesé “estamos siguiendo los pasos y los permisos que nos marca la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), para poder añadir más piezas”.