La productividad en la operativa portuaria marca en muchas ocasiones las necesidades de las terminales y, por tanto, sus peticiones y exigencias a la hora de renovar y mantener su maquinaria. Los caminos que llevan a una mayor productividad son casi ilimitados, lo que facilita la labor de las empresas fabricantes. No basta únicamente con hacer más sencillos los movimientos de la máquina, sino que un buen mantenimiento, la apuesta por la digitalización y, sobre todo, una mayor eficiencia energética marcan la diferencia en los últimos años.
Vicent Lladó, director port services Mediterranean de Konecranes, asevera que todos sus productos se desarrollan con el objetivo de mejorar la productividad, donde las nuevas tecnologías juegan un papel fundamental. La compañía ha desarrollado una solución que abarca varios programas de servicio modulares, organizados en distintas capas según el alcance de cada una. “Cada uno de estos módulos cuenta con la tecnología de nuestras propias herramientas digitales (que incluyen inspección, servicios predictivos y herramientas de predicción de desgaste de piezas) que utilizan y analizan los datos de la grúa para impulsar una mayor disponibilidad del equipo lo que, naturalmente, significa una mayor productividad”, afirma.
La transformación digital es la tendencia principal entre los clientes de maquinaria portuaria que demandan una experiencia para sus equipos similar a la que obtienen de sus proveedores de servicios financieros o de comunicaciones. “Por tanto, requieren que su flota de grúas cuente con herramientas y sistemas digitales ricos en datos que les ayuden a mejorar los servicios que proporcionan a sus clientes”, adelanta Lladó.
Sin embargo, “las herramientas digitales son solo la mitad de la historia”, reconoce el director port services Mediterranean de Konecranes. Después de una simple búsqueda en internet, cualquiera puede encontrar herramientas de planificación de mantenimiento y descargarlas de inmediato. “El problema es que estas herramientas no están fabricadas para esa maquinaria en concreto: no incluyen ni manuales, ni catálogos de piezas, ni guías de servicio para el equipo real. Y, en segundo lugar, estas aplicaciones no están diseñadas como herramientas comerciales de tamaño empresarial y, por lo tanto, no informan, por ejemplo, a un sistema ERP”, advierte el directivo. Konecranes tiene la tecnología, “pero también aporta el conocimiento del equipo y la visión completa de toda la flota a esa tecnología”.
¿Y la otra mitad? Lladó la traslada al mantenimiento a pie de grúa, donde son esenciales los especialistas en todos los ámbitos y una implantación global, “de modo que cualquier cliente puede beneficiarse de todos los servicios que sus grúas, de cualquier marca, puedan necesitar”.
Ecoeficiencia
Pero esa productividad no llega únicamente con la digitalización y un buen mantenimiento, sino que requiere además de la variable ambiental. “Cuando se trata de maquinaria portuaria, nuestros clientes tienen varias opciones para reducir emisiones, incluida la conversión de grupos electrógenos diésel en máquinas híbridas o 100 % eléctricas”, asegura Lladó.
La modernización de RTGs diésel a RTGs alimentadas eléctricamente son un ejemplo de ello, un proceso en el que se espera una reducción del 40 % en el consumo de combustible, algo en lo que Konecranes lleva trabajando un tiempo. El objetivo final es lograr una maquinaria que obtenga su energía de fuentes de energía renovables.
Salud y seguridad
La salud y seguridad laboral ayudan a lograr una productividad aún mayor. Konecranes diseña mejoras de seguridad para sus productos con el fin de que sus clientes puedan optimizar aún más su entorno de trabajo y, al mismo tiempo, maximizar la eficiencia de sus operaciones.
“Gracias a la experiencia en el sector, hemos desarrollado productos específicos para mejorar la seguridad: sistema de prevención de colisiones en pila, de pórtico o de pluma, sistema anti-izado de camiones, etc., así como productos customizados en función de las necesidades de nuestros clientes”, concluye.