Así, en Rotterdam, el fabricante sueco presenta su nuevo producto Cromma Hawkeye, que incorpora una cámara de visión en el spreader, dotado de tecnología OCR (Reconocimiento Óptico de Caracteres), que aporta un importante valor añadido a la operativa.
Bromma es conocido a escala mundial debido a la fiabilidad que ofrecen sus spreaders para grúas. En total, se han puesto en servicio más de 15.000 rotadores y spreaders para grúas desde 1960. De estos, más de 9.000 continúan funcionando por todo el mundo. Bromma ha proporcionado spreaders a más de 500 terminales situados en más de 90 países de seis continentes distintos. En la actualidad, fabrica cerca de 2.000 spreaders de todo tipo al año.
Asimismo, la compañía es un líder técnico del sector, ya que ha desarrollado el primer spreader telescópico; el primer spreader con el sistema Twin Twenty (detección de contenedores de 20 pies); el primer spreader de 45 pies y la primera línea de spreaders totalmente eléctricos.
Durabilidad
Los sistemas de servicio, fabricación y prueba de Bromma también alcanzan altos estándares. Su software de análisis de elementos finitos permite estudiar, modelar y analizar la fatiga de materiales del spreader para poder predecir cuál será su nivel de tolerancia de dicha fatiga acumulada; es decir, cuál será su nivel de resistencia después de años de duro funcionamiento. Asimismo, antes de realizar la entrega, Bromma somete a todos los componentes de los spreaders, como los twistlocks, los brazos flipper y los movimientos telescópicos, a pruebas muy exhaustivas.