Una historia y dos ideas visionarias: el contenedor y China
La historia del Grupo comenzó con dos ideas visionarias. Desde muy temprano, el fundador Jacques Saadé reconoció el gran potencial del contenedor para el futuro del comercio global. A principios de los años 1980, también previó que China se convertiría en “la fábrica del mundo” en una economía cada vez más globalizada. En pocos años, concretando estas ideas, creó CMA CGM.
Al descubrir las cajas de acero utilizadas por el Departamento de Defensa de Estados Unidos para enviar ropa y equipos a las tropas, Jacques Saadé tuvo la certeza de que los contenedores presentaban un enorme potencial para el comercio internacional. En su opinión, no eran sólo una excelente manera de transportar una gama infinita de productos ahorrando espacio. También podrían hacer que el envío sea más seguro, más eficiente, más flexible y de mejor calidad para las miles de empresas que envían sus productos a todo el mundo.
El futuro le dio la razón y el Grupo CMA CGM ahora transporta más de 21 millones de TEUs cada año, sirviendo a sus clientes en todo el mundo. Pero en 1978, la aventura apenas comenzaba y muchos se mostraban escépticos, creyendo que los puertos y los clientes no estaban preparados.
La Compagnie Maritime d’Affrètement tenía cuatro empleados, un barco y sólo una ruta marítima entre Beirut, Latakia, Livorno y Marsella. Este primer servicio mediterráneo se desarrolló para incluir el continente norteamericano y CMA compró sus primeros barcos, “Ville d’Orient” y “Ville du Levant”, con el objetivo de facilitar el comercio entre el Mediterráneo oriental y occidental mediante contenedores.
En 1986, CMA se convirtió en una empresa joven y de rápido crecimiento que disfrutaba de una sólida posición en sus mercados. Se confirmó el papel de China en el centro del comercio internacional y había llegado el momento de pensar en grande. Durante los siguientes diez años, se lanzaron una serie de iniciativas estratégicas. En primer lugar, se abrieron oficinas en Asia, primero en Hong Kong y Manila, luego en Shanghái y en toda China. En ese momento, el Grupo empleaba a 2.000 personas en 63 agencias en todo el país.
Después de ampliar su línea entre el norte de Europa y el Mar Rojo hasta Asia, en 1987 se firmó un acuerdo comercial con importantes compañías navieras que prestan servicios en el Red Sea Express, la ruta marítima de China a Egipto. 1994 marcó un nuevo punto de inflexión histórico con el lanzamiento de la Línea Francia Asia o FAL. Esta red densa y extremadamente activa permitió a nuestros clientes beneficiarse de ocho rutas marítimas entre China y el norte de Europa.
Esta estrategia de expansión en Asia permitió a CMA CGM convertirse en pocos años en la naviera número uno entre Asia y el Mediterráneo y la número dos entre Asia y el norte de Europa.