Menú
Suscripción

El Consejo de la APV adjudica las obras de la Terminal Norte a Acciona, Jan de Nul y Bertolín

El Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV) ha decidido adjudicar las obras Terminal Norte a la UTE formada por Acciona Construcción, Jan de Nul NV y Grupo Bertolín, en su oferta variante.

VALENCIA. Con esta decisión, el Consejo de Administración de la APV da un nuevo paso hacia el inicio de las obras del nuevo muelle de contenedores del Puerto de Valencia, que se ubicará en la Ampliación Norte del recinto y que albergará la futura Terminal Norte.

A comienzos del pasado mes de junio, la mesa de contratación de la APV encargada de seleccionar la mejor oferta para la realización de estas obras elevó una resolución en la que proponía la adjudicación de los trabajos a la UTE formada por Acciona Construcción, Jan de Nul y Grupo Bertolín.

El siguiente paso en el proceso administrativo que desembocará en el inicio de las obras del futuro muelle de contenedores era el visto bueno del Consejo de Administración de la APV, un hecho que se ha producido en la reunión de hoy.

La futura Terminal Norte, que se ubicará en aguas abrigadas de la ampliación norte -cuyas obras finalizaron en 2012- tendrá una superficie de unas 137 hectáreas y 1.970 metros de línea de atraque, con una capacidad para albergar hasta cinco millones de contenedores. Las obras se prolongarán a lo largo de 54 meses.

La terminal contará con diseño, tecnologías y equipamiento de última generación, con una instalación totalmente electrificada, que permita atender los grandes buques portacontenedores en servicio, con elevados rendimientos tanto en las operaciones marítimas como terrestres.

La alcaldesa de Valencia, María José Catalá, ha calificado el día como “histórico”, y ha asegurado que “el Puerto de Valencia va a poder seguir desplegando todo su potencial”, además de poner en valor “todo lo que hemos adelantado en el último año en contraposición al bloqueo sufrido en los últimos ocho”. No obstante, la primera edil ha advertido que el Ayuntamiento de Valencia “va a estar vigilante para mantener la calidad” de las aguas portuarias.

Por su parte, Pilar Bernabé, delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, ha catalogado el proyecto como “una de las principales obras e inversiones que llevará a cabo el Gobierno” en Valencia. Ha querido resaltar “el trabajo realizado” en la consecución de esta infraestructura”, y ha incidido en “la transformación de la logística ferroviaria”, en referencia a la importancia que tendrá el ferrocarril en la futura terminal.

Nueva demanda de la Comissió Ciutat-Port

La plataforma Comissió Ciutat-Port ha presentado una nueva demanda de ejecución forzosa de la decisión judicial del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, exigiendo al Ministerio que “requiera a Puertos del Estado, en tanto que responsable ambiental del proyecto, a cumplir con sus obligaciones”, afirma la organización en un comunicado.
La asociación asegura que “se va a dragar hasta 28 metros de profundidad en la dársena del puerto y hasta 27 metros en Sagunto y que se pretende dragar hasta 10 millones de metros cúbicos en Valencia. Según la plataforma, “se producirá una verdadera cantera profunda que tendrá un indudable impacto ambiental y que afectará a la dinámica de las playas de la Albufera
La Comissió Ciutat-Port ha advertido que si los miembros del Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria “llegasen a adjudicar las obras de ampliación en las actuales circunstancias podrían incurrir no sólo en una extralimitación de sus competencias si no también en eventuales responsabilidades personales”.

Gestión de La Marina

Por otro lado, el Consejo de Administración de la APV ha propuesto otorgar a la UTE Serveis Marítims Port Eivissa y Ocibar la concesión administrativa para la Adecuación y Explotación de las instalaciones náutico-deportivas de la zona norte del Puerto de València (en La Marina), en los terrenos y aguas definidos en la Condición 3ª del Pliego de Condiciones Generales y Particulares y de conformidad con el Proyecto Básico presentado en su oferta.

Previamente a la concesión, la empresa someterá su propuesta al trámite de información pública y de informes oficiales, conforme a lo dispuesto en el apartado 6 del artículo 86 del Texto Refundido de la Ley de Puertos del Estado y de la Marina Mercante.

Con la decisión de hoy del Consejo de Administración de la APV, se disipa la incertidumbre sobre la continuidad de una de las actividades fundamentales del Consorcio Valencia 2007, evitándose así cualquier perjuicio a los usuarios actuales de las instalaciones, y se dan los primeros pasos para la puesta en valor de esta área de usos náutico-deportivos de Valencia. Asimismo, se despeja cualquier duda que pudiera tener la Comisión Europea y otros organismos comunitarios que estaban dispuestos a ejecutar una sanción al Reino de España.

Características de la concesión

a) El plazo de la concesión será de 35 años, ampliables con hasta un máximo de dos prórrogas sucesivas de 8 y 7 años, respectivamente.

b) Se estima una inversión de 84.820.348,93 euros.

c) El objeto de la concesión es la adecuación y explotación de las instalaciones náutico-deportivas de la zona norte del Puerto de València e incluye la prestación de los servicios de gestión de los puestos de amarre, servicio de control marítimo, suministro de carburantes a embarcaciones, suministro de agua, energía eléctrica, telefonía y transmisión de datos, servicio de aparcamiento de vehículos, recogida selectiva de basuras y residuos, desarrollo de actividades de carácter formativo y educativo y de apoyo al deporte náutico en el campo de la náutica deportiva, como pueden ser cursos de vela en sus distintas variantes, organización de eventos y competiciones deportivas y actividades culturales, servicios de varada y reparación de embarcaciones, especialmente destinados a prestar un servicio integral a los usuarios de las instalaciones, y servicios comerciales como la explotación de locales comerciales, ocio y/o restauración, u oficinas.

La ordenación de los amarres propuesta mejorará la productividad y la competitividad, y permitirá aumentar la presencia de embarcaciones tanto de gran eslora como de pequeña y mediana eslora. Todo ello sin dejar de atender a embarcaciones de carácter social, con la construcción de una marina seca para atender más adecuadamente este tipo de barcos más pequeños.

El proyecto contempla 370 amarres en la dársena interior (de 12 metros hasta 130 metros de eslora), 74 amarres en la dársena norte (de 24 metros a 115 metros de eslora), y 227 amarres en la dársena sur (desde 6 metros hasta 40 metros de eslora).

En el varadero del proyecto, la capacidad de la maquinaria de izada y botadura propuesta abarcará embarcaciones desde 10-15 metros de eslora hasta 60 metros. Además, se dispondrá de una marina seca capaz de albergar 228 embarcaciones de hasta 8 metros.

Para la parte de tierra se contemplan instalaciones capaces de acoger el tejido productivo, oficinas -que ya existe en la dársena interior- y espacios dedicados a la formación náutica, investigación, comerciales y de restauración y ocio.