La Asamblea comenzó con las palabras de la presidenta del Montepío, Pepa Ruano, quien deseo salud a todos los asistentes y familiares de los mismos. Además, se informó de que, con motivo de la adaptación a la legislación vigente en materia de Solvencia II, se ha tenido que cambiar de actuario y, conjuntamente con el abogado, “se está trabajando en dicha adaptación”.
También se señaló que, durante el estado de alarma decretado en marzo, el Montepío siguió ofreciendo sus servicios a través del email y teléfono, puesto que sus empleados estuvieron teletrabajando. Siguiendo con las normas sanitarias, el Montepío volvió a abrir su sede en mayo.
“Como es normal, durante este año no se han podido realizar las actividades que se desempeñaban (día del socio, clases de baile, cursos de fotografía, etc.)”, pero la dirección espera “poder retomarlas cuando la situación sanitaria lo permita”.
Por su parte, el tesorero del Montepío, Pepe Furió, expuso ante los asistentes el balance de cuentas, “el cual arroja buenos resultados a pesar de la situación actual”.
La Asamblea finalizó sin ruegos ni preguntas.