Sin embargo, el nuevo preaviso de huelga, el tercero en poco más de un mes, ha llevado a las empresas a levantarse de la mesa de negociación ante lo que consideran un injustificado torpedo en la línea de flotación del proceso de diálogo. En esta tesitura, y vista la estrategia sindical de intensificar la presión sobre las empresas y de amenazar con estrangular aún más la actividad portuaria con 31 días más de paros de 24 horas, el Gobierno Vasco, según reconoció el viernes la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, ha solicitado al ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, que medie en el conflicto.
Fórmulas “extraordinarias”
A falta de un acuerdo entre las partes, que en estos momentos se antoja una posibilidad lejana por mucho que los sindicatos pretendan seguir dialogando con la bala del nuevo preaviso en la recámara, la mediación de Ábalos se presenta como una más entre las posibles alternativas que se barajan para cerrar la amplia brecha que está abriendo la huelga en el Puerto de Bilbao.
Fracasada también la vía de la mediación laboral en el marco del Consejo de Relaciones Laborales, el abanico de posibles fórmulas “ordinarias” de resolución de conflictos se estrecha, activando la posibilidad de recurrir a otras fórmulas “extraordinarias” o al menos, menos convencionales.
Así, la Autoridad Vasca de la Competencia (AVC) permanece vigilante desde agosto sobre el conflicto desde el punto de vista del derecho de la competencia y valora la importancia de que se apruebe el V Acuerdo Marco sobre el que la CNMC informará en próximas fechas.
Semana decisiva
Por otra parte, tampoco se descarta la activación del arbitraje obligatorio, que como ya explicó este Diario, se trata de una fórmula de compleja aplicación y un recurso “extraordinariamente singular” como reconoció el propio CRL. de Euskadi.
Ante el cariz que está tomando la huelga y la situación límite a la que está abocando a muchas empresas, en ciertos círculos comienza incluso a justificarse el recurso a la vía policial para garantizar la carga y descarga de los buques, más aún cuando el nuevo preaviso de huelga prevé paros de 24 horas.
El segundo período de la huelga entra hoy en su última semana con la interrogante de saber si en estos siete días se despejará la posibilidad de un tercer paro de 31 días y 24 horas que, está vez sí, podría activar fórmulas “extraordinarias”.
A pesar de los tímidos avances registrados la pasada semana, la amenaza de una nueva huelga de 31 días/24 horas sitúa de nuevo el proceso negociador en punto muerto
EL DATO
31d/24 hEl segundo período de la huelga entra hoy en su última semana con la interrogante de saber si en estos siete días se despejará la posibilidad de un tercer paro de 31 días y 24 horas a partir del 9 de noviembre que, está vez sí, podría activar fórmulas “extraordinarias”.
Tapia definió la situación en los muelles bilbaínos como “kafkiana” y lamentó que los sindicatos no estén respetando los servicios mínimos. Arantxa Tapia: “Tráficos que se pierden, puede que no se recuperen”En una entrevista concedida a Radio Vitoria el pasado viernes, la consejera Arantxa Tapia definió la situación en los muelles bilbaínos como “kafkiana” y lamentó que los sindicatos no estén respetando los servicios mínimos, lo que hace que el impacto sobre las empresas vascas sea “muy relevante”. La consejera peneuvista aseguró no entender la estrategia sindical de intentar parar la actividad en Euskadi “en un momento de crisis económica en la que tánto nos jugamos en lo económico, que es lo que soporta todos los servicios”.
Afecciones a otros servicios
En este sentido, Tapia recordó la resolución de la CNMC sobre “cómo tiene que ser el sistema de estiba”. “Y en este momento, además de afectar al propio sistema de estiba, los sindicatos están afectando a otros servicios que no son puramente estiba. Existe un exceso de actitud de pararlo todo por parte de los sindicatos que no es entendible”, añadió. La consejera se mostró especialmente preocupada por los efectos de una huelga “que afectan no sólo a Euskadi, sino a todo el hinterland del Puerto de Bilbao”. “Tráficos que se pierden en un determinado momento -advirtió- puede que se no vuelvan a recuperar, porque cuando un tráfico busca un puerto en el que se siente cómodo, quizá luego no vuelva a cambiar a la situación inicial”.
Un reducido grupo de estibadores, dadas las restricciones, presenció el Pleno de Control el viernes en Vitoria-Gasteiz. Los estibadores llevan la huelga al Parlamento VascoEl Parlamento Vasco abordó el viernes por primera vez la problemática de la huelga de la estiba desde su inicio el 9 de octubre, con una pregunta de Iker Casanova, portavoz suplente de EH Bildu, a la vicelehendakari y consejera de Trabajo y Empleo del Gobierno Vasco, Idoia Mendía (PSE), para su respuesta en la sesión del Pleno de Control.
Casanova, quien saludó desde la tribuna de oradores al reducido grupo de estibadores que desde la tribuna del público presenciaba la sesión, situó el origen del conflicto en “la defensa de las condiciones laborales, ante la voluntad que tienen las empresas que gestionan el servicio de empeorar la calidad del empleo”. “Además de rechazar las reivindicaciones de los trabajadores, las empresas concesionarias han hecho maniobras ante la Autoridad Portuaria para que tome represalias contra este colectivo en lucha; en concreto, contra la bolsa de los trabajadores eventuales“, justificó.
“Le da la razón a la patronal”
Casanova recordó que el 20 de octubre “la dirección del puerto de Santurtzi decidió retirar el permiso de entrada a las instalaciones del puerto a un centenar de trabajadores eventuales que llevan doce años realizando trabajos de estiba, lo que quiere decir que, de facto, han despedido a estas cien personas, ya que no pueden acceder a su lugar de trabajo habitual”. El parlamentario de EH Bildu acusó al Gobierno Vasco de que al mismo tiempo que éste se considera a sí mismo “como defensor del empleo digno, cuando hay un conflicto laboral. o se queda callado o denuncia que el conflicto laboral no se está produciendo en el momento o forma adecuados, o, directamente, le da la razón a la patronal”. “Esta es una buena ocasión para que el Gobierno actúe a favor de los puestos de trabajo dignos”, dijo Casanova, quien pidió a Mendía la postura del Gobierno Vasco en relación con la huelga.
“Solución innovadora de plena igualdad”
Mendía respondió que una de las funciones de la consejería de Empleo y Trabajo es “proteger el derecho legítimo a la huelga de todos los trabajadores” y admitió que existe una denuncia de los sindicatos, cuyo expediente está siendo tramitado por la Inspección de Trabajo, aunque advirtió que “ni puedo, ni debo informar” sobre su contenido y desarrollo.
Mendía dijo que el Gobierno Vasco “se ha sentado siempre que se le ha requerido en los conflictos laborales”. “Intermediamos cuando nos lo piden ambas partes, pero este Gobierno no puede sustituir a la negociación colectiva o al diálogo social, que son los ámbitos desde los que más se puede avanzar”.
La consejera socialista de Trabajo y Empleo confió en que el conflicto se cierre con “una solución en términos de empleo de calidad”. “Hace falta innovación, diálogo, concertación e igualdad, y estoy convencida de que entre los sindicatos, además de la protección de sus derechos, está también la idea de buscar una solución innovadora de diálogo y de plena igualdad”.