La citada enmienda entró en vigor el 1 de enero con el fin de reducir el contenido de azufre del fueloil utilizado por los buques, estableciendo el máximo en el 0,5 % masa/masa. La última modificación, de enero de 2012, lo situaba en el 3,5 % m/m, por lo que se trata de una reducción significativa, con importantes implicaciones comerciales, técnicas y legales que influirán sin duda en el sector marítimo.
Además, como ha destacado el capitán marítimo, "la norma no persigue solo la reducción de los óxidos de azufre que se producen al quemar el combustible, también se prohíbe llevarlo a bordo".
Por ello, a partir del 1 de marzo de 2020, los barcos que lleguen a puerto transportando fueloil no reglamentario, "tendrán la obligación de descargarlo y cargar combustible reglamentario", ha apuntado Pérez, "durante este proceso, el buque con combustible pesado tendría que parar toda operativa, y podría enfrentarse a sanciones ejemplares".
Medidas preventivas
El objetivo principal de la reunión ha sido informar, a través de los consignatarios, a las navieras, estableciendo medidas preventivas para evitar que lleguen a Alicante los buques con combustibles contaminantes por óxido de azufre, ya que el puerto está integrado en la ciudad, y es un objetivo para ambas instituciones reducir la contaminación, de la actividad portuaria, a niveles más bajos que los permitidos por la normativa.