El Puerto Baiona sigue avanzando en su compromiso con la calidad de servicio a través de un proceso de optimización de infraestructuras que comienza a ser ya visible. La Región de Nueva Aquitania inició a a finales de marzo la tercera y última fase de la reestructuración de sus muelles en el área de Blancpignon con la reconstrucción del muelle Armand Gommès.
Esta obra mejorará la integración de las actividades portuarias en el tejido urbano, para ofrecer un medio alternativo y complementario a la carretera con el objetivo de desarrollar la intermodalidad, la actividad económica y el empleo, y mejorar la competitividad del puerto (accesibilidad, servicios, etc.). Esta operación, valorada en cerca de 24 millones de euros, permite además dar respuesta a los problemas de seguridad que plantea el muelle existente.
También se ha favorecido un diseño sostenible de la estructura. Así, el Muelle Gommès ofrecerá una línea de atraque de aproximadamente 180 metros con el objetivo final de tener un frente de atraque de unos 600 metros de longitud.
Este programa se inició tras la finalización de las obras de refuerzo del muelle Edmond Foy, que tuvieron una duración de nueve meses y un coste de 2,9 millones de euros. Con su reparación se solventa un importante problema de seguridad, ya que este muelle sufría hundimientos del terraplén desde hace varios años. Asimismo, la Región de Nueva Aquitania, a través del Puerto de Baiona, está comprometida desde hace años en un proceso de mejora de las condiciones ambientales en el perímetro del estuario del Adour.