La entrada de este producto en forma de granel líquido por el Puerto de Motril en lo que va de año representa ya el 48,6% del total contabilizado durante el año pasado, que finalizó con 129.695 toneladas. La melaza es una mercancía procedente de Rusia, principalmente, pero que también se importa de Egipto, Chile o la India, entre otros países, dependiendo de si es melaza de caña o de remolacha.
Empleo
Otra vertiente económica de esta mercancía es la generación empleo “puesto que todos los camiones cisterna que se usan para la carga y posterior traslado a la fábrica son conducidos por profesionales de la zona de la Costa Tropical, en su mayoría autónomos”, ha señalado el presidente de la Autoridad Portuaria, José García Fuentes, que calcula que tal volumen de toneladas puede generar 629 viajes.
Además, es un taller local de calderería el encargado de conectar la torre de descarga para que la malaza fluya del barco a la cisterna. Otro ejemplo de esa complementariedad entre el puerto y las industrias de la zona y la provincia es la materia prima que necesita la factoría de Lecta en Motril (antigua Celulosa). En ese sentido, esta semana se ha procedido a la descarga de 2.000 toneladas de pasta de papel.