No solo se han superado en volumen los datos del año pasado, sino también los de agosto de 2019, antes de que se produjese la pandemia que afectó a la economía internacional.
El balance es positivo tanto en graneles líquidos como en sólidos y mercancía general, con los incrementos más significativos registrados precisamente en el sector con mayor movimiento. Tanto el crudo de petróleo como los productos refinados y otros líquidos han impulsado un aumento del 60%, con más de 800.000 toneladas operadas en agosto. La recuperación de la movilidad al mejorar el contexto socioeconómico ha favorecido una mayor demanda de combustibles y por tanto de actividad de la Refinería.
Respecto a los graneles sólidos, productos agroalimentarios como cereales y harinas han impulsado un crecimiento del 18%, superándose las 352.000 toneladas. El Puerto Exterior es un factor decisivo en la consolidación de A Coruña como hub de estos graneles, con gran peso en el tejido económico de Galicia, ya que por el Puerto se mueve el 70% de las materias primas que se importan para alimentar a la cabaña ganadera gallega.
En cuanto a mercancía general, también se alcanzan cifras positivas, manteniéndose estables en un 2% de incremento, gracias a la consolidación de productos siderúrgicos y otros materiales de construcción.
La pesca, aun en cifras negativas con respecto a 2020, muestra signos de recuperación, y la Lonja de A Coruña se mantiene como la primera de Galicia en volumen de pesca fresca y marisco, de acuerdo con las estadísticas oficiales de la Consellería do Mar.