La ampliación del Puerto de Melilla requerirá una inversión aproximada de 180 millones de euros, según los cálculos realizados por la autoridad portuaria, y supondrá ganar al mar una superficie de 25 hectáreas, que estarán destinadas a la instalación de industrias de riesgo, como los depósitos de combustible o la incineradora que están en el centro de la ciudad, y crearán espacios para el tráfico de contenedores. El concurso que se ha abierto ahora para elegir a la empresa que se encargará de la asistencia técnica para la redacción del proyecto da de plazo hasta el día 7 de mayo para presentar las ofertas por parte de los interesados. La fecha para la apertura de plicas no se ha anunciado, pero a tenor del ritmo que quiere imprimir al proceso la autoridad portuaria, se espera que ésta no se demore mucho.Con esta ampliación, considerada fundamental para el futuro del Puerto de Melilla, los responsables portuarios pretenden no solo facilitar el crecimiento del tráfico portuario, sino potenciar el desarrollo económico tanto del puerto como de toda su área de influencia, especialmente la ciudad de Melilla.Según cálculos de los responsables del enclave, la ampliación del puerto generará unos 2.500 puestos de trabajo directos e indirectos, una cifra que reduciría en 15 puntos la tasa de paro actual de la ciudad.