Acompañado por los responsables de la Autoridad Portuaria de Santander, Allen visitó también la Terminal de Graneles Sólidos Alimentarios, donde Andrés Gómez Bueno, director general de TASA, empresa que gestiona la terminal, le mostró algunas de las instalaciones y mecánicas de trabajo de esta infraestructura en la que se manipulan mercancías como trigo, centeno, cebada, maíz y otros cereales, además de harinas de colza, palma y soja.Allen visitó el centro del control de la terminal, donde le explicaron las principales dotaciones técnicas y los servicios que presta. Durante la visita, el embajador canadiense comprobó el alto grado de automatización de los procesos de descarga, almacenamiento y expedición de las mercancías.La Terminal es una instalación portuaria diseñada, construida y gestionada por la empresa TASA, SA (sociedad constituida por el grupo cántabro GOF y Ahorro Corporación Financiera). Ocupa una superficie de 35.000 metros cuadrados y ha supuesto una inversión global de 40 millones de euros. En un horizonte de 15 años, aspira a canalizar un tráfico anual de más de un millón de toneladas de mercancía agroalimentaria.