La naviera, que opera actualmente en cinco países, con 21 rutas y 21 delegaciones, cuenta con una flota compuesta por 30 buques entre ferries y fast ferris y en el último año transportó a un total de 3.700.000 pasajeros y facturó 362 millones de euros."La implantación y la expansión en mercados internacionales es uno de los ejes estratégicos de Baleària, que actualmente supone más del 24% de los pasajeros transportados", explican.La naviera, con presencia en cinco países, opera cuatro rutas internacionales, con más de 880.000 pasajeros. La expansión internacional de la compañía se centra en dos zonas: el norte de África y el Caribe. Así, cuenta con dos rutas a Marruecos (Algeciras-Tánger desde 2003 y Almería-Nador desde el verano pasado), y desde hace tres años tiene una conexión con Argelia (Valencia-Mostaganem). Además, la compañía también opera en el Caribe, donde ofrece desde 2011 una conexión entre Estados Unidos y Las Bahamas. "Actualmente, las líneas internacionales suponen el 20% de nuestra facturación. Queremos consolidar nuestra presencia en el norte de África y seguir creciendo en el Caribe", ha subrayado Adolfo Utor, presidente de Baleària. Baleària es, además, una de las navieras pioneras a escala mundial en el uso del gas natural licuado, un combustible menos contaminante. En este sentido, tiene previsto incorporar a lo largo del 2019 los dos primeros ferries propulsados por GNL que navegarán en el Mediterráneo, además de remotorizar en los próximos años varios de sus buques para que usen esta energía limpia, mientras que el buque Abel Matutes, cuenta desde el año pasado con el primer generador de energía a gas en un ferry de pasaje en España.Por otra parte, uno de los retos actuales de la empresa para seguir creciendo y ser competitiva es la transformación digital, con la implantación de iniciativas tecnológicas que contribuyan a mejorar la experiencia del cliente y la gestión interna. "Estamos desarrollando el concepto de smart maritime, buques y terminales más ecoeficientes que aporten valor añadido a los pasajeros gracias al empleo de tecnologías y procesos innovadores", ha explicado Utor.
Inicios
En junio de 1998, Adolfo Utor lideró la creación de Baleària junto con otros ex trabajadores de la naviera Flebasa, que había entrado en quiebra. La recién nacida Baleària apostó por la nuevas tecnologías y la renovación de la flota, y solo tres años después revolucionó el sector marítimo al incorporar el primer buque de alta velocidad que conectaba las Baleares con la península, el "Federico García Lorca", buque insignia de la compañía durante muchos años.