Costa Brava Cruise Ports y Deltebre Port son las marcas con las que se trabaja desde Ports de la Generalitat en el ámbito de los cruceros para vender puertos y destinos. Dos marcas que ya son conocidas y que han servido para posicionar a estos enclaves en la industria crucerística internacional, tal y como explican Joan Pere Gómez y María Cano, gerente y responsable de cruceros, respectivamente, de Ports de la Generalitat.La estrategia que sigue actualmente esta entidad es reforzar el posicionamiento del Puerto de Palamós (Girona), que ya cuenta con un tráfico de cruceros considerable -32 escalas y 24.600 pasajeros en 2016- y potenciar a los puertos de Roses y Sant Carles de la Ràpita, que debutaron más tarde en el ámbito de los cruceros y trabajan para captar cuota de mercado.En el caso de Palamós, este enclave se ha posicionado como un referente en cruceros de lujo, como lo demuestra el hecho de que en 2016 el 66% de las compañías que visitaron el enclave pertenecieran a este segmento, en busca de destinos turísticos únicos y singulares como la Costa Brava. Además, Palamós ocupa la vicepresidencia de la asociación MedCruise, un puesto que da relevancia internacional a este destino de la Costa Brava. Este año, el enclave se estrenará como escala en los itinerarios de las navieras Aida y P&O, que llevarán hasta el puerto catalán a sus buques "AidaStella" y "AidaAura", por un lado, y "Oriana", por otro.En cuanto a Roses, el año pasado el enclave cerró su quinta temporada estable de cruceros con un millar de pasajeros y la escala de cinco buques. El cierre del año coincidió con el estreno en Roses de la naviera Noble Caledonia, que llevó hasta este puerto de la Costa Brava a su buque "Serenissima".Otra de las líneas estratégicas que ha iniciado Ports de la Generalitat, y en la que seguirá trabajando en este 2017, es en el negocio de los megayates, un mercado interesante que actualmente se concentra sobre todo en Italia y en la Costa Azul francesa pero que puede aportar interesantes beneficios a Catalunya.