BRUSELAS. Italia notificó a la Comisión sus planes de adoptar un régimen de 570 millones de euros para incentivar a los operadores de buques a conectarse a la infraestructura de electricidad en puerto cuando estén atracados en puertos marítimos, con el fin de alimentar los servicios, sistemas y equipos de a bordo. El régimen estará vigente hasta el 31 de diciembre de 2033.
La ayuda consiste en una reducción de hasta el 100% de las denominadas “tarifas generales del sistema”. Estas cargas están incluidas en el precio de la electricidad y se destinan a financiar determinados objetivos de política pública, entre ellos las energías renovables.
La reducción se traducirá en un menor precio de la electricidad para los operadores de buques cuando compren electricidad en tierra y situará el coste de la electricidad a un nivel competitivo con el coste de producir electricidad a bordo mediante motores alimentados con combustibles fósiles.
Al reducir el coste de la electricidad en puerto para los buques, la medida incentivará a los operadores de buques a optar por el suministro eléctrico más respetuoso con el medio ambiente, evitando así importantes emisiones de gases de efecto invernadero, contaminantes atmosféricos y emisiones sonoras.
Inicialmente, la reducción cubrirá el 100% de las cargas del sistema general. Italia se comprometió a establecer un mecanismo de control anual para verificar la diferencia entre los costes reales de la compra de electricidad en tierra y los costes reales de la autogeneración de electricidad utilizando combustibles fósiles a bordo y ajustará el nivel de la ayuda en consecuencia.